Valdés afirma que deja un IFE mejor posicionado

Al despedirse como consejero presidente del IFE, Leonardo Valdés Zurita aseguró que deja un órgano mejor posicionado que mejoró la percepción de confianza que se perdió después de las elecciones del 2006 y demandó replantear procedimientos y prácticas que abaraten nuestra democracia, sobre todo ante los índices de pobreza que enfrenta el país.

“La dramática desigualdad que vive nuestro país, al igual que la mayoría de los países de América Latina, nos debe obligar a repensar procedimientos y prácticas, que favorezcan una democracia más incluyente, pero también menos costosa”, emplazó. 

Asimismo pidió a los cuatro consejeros que permanecen no dejar que la incertidumbre los distraiga de sus responsabilidades, sin importar que la Cámara de Diputados elija o no las cinco vacantes que tendrá el instituto a partir de este jueves de manera indefinida.

“El IFE seguirá trabajando, el IFE no se detendrá”, aseveró.

Valdés Zurita subrayó la importancia de la nueva reforma electoral, pero advirtió que esas negociaciones que se prolongan por parte de la clase política, “vulnera lamentablemente, la garantía constitucional de estabilidad e independencia” del IFE.

“Si no se respeta la autonomía constitucional y el cumplimiento imparcial y legal de sus atribuciones, no habrá reforma electoral que nivele el piso de la competencia por el poder político”, advirtió.

En su última sesión al frente del IFE, Valdés  aseveró que este órgano electoral del IFE es mucho más que su Consejo General, pues su fortaleza descansa en su estructura, pero recalcó que si no hay respeto a su autonomía constitucional no habrá reforma que alcance para mejorar el sistema electoral.

Valdés Zurita fue el primero en despedirse después de seis años al frente del IFE, al igual que Alfredo Figueroa, Macarita Elizono y Francisco Guerrero.

Durante su discurso, Valdés Zurita defendió su trabajo al frente del IFE y los avances que se lograron e incluso recordó los enfrentamientos que sostuvieron con los poderes fácticos al instrumentar el modelo  de comunicación política que impidió a candidatos y  partidos  la contratación de espacios publicitarios en los medios de comunicación.

“Instrumentar el modelo de comunicación política, nos enfrentó a los poderes fácticos y al arbitraje electoral y el arbitraje electoral provocó fricciones con los contendientes por los poderes públicos. Ese fue el costo de la Reforma Electoral 2007-2008 para el IFE y para quienes integramos este Consejo General”, recordó.

Pese a ello, Valdés Zurirta consideró que en los últimos cinco años el IFE mejoró la percepción de confianza en el Instituto que disminuyó con el debate poselectoral de 2006 y ahora “sin duda, en 2013,  está mejor posicionado que en 2008”.

Valdés Zurita recordó que este jueves, el IFE reeditará  un fenómeno similar al de octubre de 2010 donde se quedaron con seis integrantes a unos meses de las elecciones presidenciales del 2012 porque la Cámara de Diputados lo logró acuerdos, sin embargo ofreció su respaldo a la consejera María Marván y a los consejeros Marco Antonio Baños, Lorenzo Córdova y Benito Naciff para sacar adelante el trabajo en esa institución.

“Hoy, al igual que en 2010, el IFE es más, mucho más que su Consejo General, aún con sólo consejeros electorales el IFE seguirá tomando las decisiones para preparar el próximo proceso electoral federal y apoyar el desarrollo de la vida democrática en todo el país”, confió.

Alejandro Páez, La Crónica, 31 de octubre.