El Instituto Federal Electoral (IFE) desmintió anoche al presidente del Senado, Gustavo Madero Muñoz, lo mismo que a otros senadores que propalaron versiones en el sentido de que ese instituto fiscalizaría las cuentas bancarias de cada uno de los integrantes de la Cámara alta.
Este órgano electoral —precisó el IFE en un comunicado— sólo actuaría en caso de denuncia previa, sobre presuntas violaciones a la ley electoral.
Fue el presidente del Senado, Madero Muñoz (PAN), quien ayer por la tarde había informado que “nos comunicaron que precisamente como actores políticos habrá un seguimiento puntual a nuestras finanzas y nuestras cuentas de cheques también serán revisadas con miras al proceso electoral, como parte de un acuerdo que tomó el IFE”.
El senador panista dijo estar de acuerdo con la medida, pues todo lo que se pueda hacer en este sentido es necesario apoyarlo, para que evitemos cualquier rendija en la cual el narcotráfico y el crimen organizado influyan de manera inconveniente en la política y en el poder público.
El coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete Ruiz, también había indicado que “hemos recibido un comunicado del IFE en donde nos dan a conocer la normativa aprobada por el organismo para vigilar y darle seguimiento a las finanzas de partidos políticos y candidatos, pero también a lo que se llama en el argot administrativo, a “personajes públicos políticamente expuestos”.
El perredista dijo que se dará seguimiento al patrimonio “absolutamente de todos” los senadores y particularmente de los coordinadores, y añadió que “le damos la bienvenida, nos parece una medida correcta, adecuada, qué bueno que haya una vigilancia especial”.
Aseguró incluso que también serán auditados los diputados y el Ejecutivo federal, es decir, “todo el conjunto de servidores públicos que estamos sujetos a peligros y yo diría, lo digo yo a título personal, hasta tentaciones”.
Y fue más allá el coordinador del PRD al afirmar que serán fiscalizados los recursos individuales, las cuentas particulares, “cuánto ganamos, cuánto gastamos, qué nivel de vida tenemos, cuál es nuestro patrimonio, cómo vive nuestra familia y todo lo que es un seguimiento puntual que el Estado mexicano debe realizar”.
Por la noche, el IFE desmintió a los legisladores al informar que carece de facultades para revisar las cuentas bancarias de los senadores.
Este órgano electoral —precisó el IFE en un comunicado— sólo actuaría en caso de denuncia previa, sobre presuntas violaciones a la ley electoral.
Fue el presidente del Senado, Madero Muñoz (PAN), quien ayer por la tarde había informado que “nos comunicaron que precisamente como actores políticos habrá un seguimiento puntual a nuestras finanzas y nuestras cuentas de cheques también serán revisadas con miras al proceso electoral, como parte de un acuerdo que tomó el IFE”.
El senador panista dijo estar de acuerdo con la medida, pues todo lo que se pueda hacer en este sentido es necesario apoyarlo, para que evitemos cualquier rendija en la cual el narcotráfico y el crimen organizado influyan de manera inconveniente en la política y en el poder público.
El coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete Ruiz, también había indicado que “hemos recibido un comunicado del IFE en donde nos dan a conocer la normativa aprobada por el organismo para vigilar y darle seguimiento a las finanzas de partidos políticos y candidatos, pero también a lo que se llama en el argot administrativo, a “personajes públicos políticamente expuestos”.
El perredista dijo que se dará seguimiento al patrimonio “absolutamente de todos” los senadores y particularmente de los coordinadores, y añadió que “le damos la bienvenida, nos parece una medida correcta, adecuada, qué bueno que haya una vigilancia especial”.
Aseguró incluso que también serán auditados los diputados y el Ejecutivo federal, es decir, “todo el conjunto de servidores públicos que estamos sujetos a peligros y yo diría, lo digo yo a título personal, hasta tentaciones”.
Y fue más allá el coordinador del PRD al afirmar que serán fiscalizados los recursos individuales, las cuentas particulares, “cuánto ganamos, cuánto gastamos, qué nivel de vida tenemos, cuál es nuestro patrimonio, cómo vive nuestra familia y todo lo que es un seguimiento puntual que el Estado mexicano debe realizar”.
Por la noche, el IFE desmintió a los legisladores al informar que carece de facultades para revisar las cuentas bancarias de los senadores.
José Contreras y Alejandro Páez, Crónica, 22 de enero.
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