Davos, 29 de enero. El presidente Felipe Calderón Hinojosa aclaró personalmente al dueño de la revista Forbes, Steve Forbes, que “nos va muy bien en México”, en contra de lo afirmado por su publicación de que se avecina un desastre en el país.
De hecho, reconoció que hace falta una estrategia “muy fuerte” de relaciones públicas para cambiar la percepción sobre México en algunos círculos de Estados Unidos.
“Alguien tiene que hablar con él (Forbes), decir que tiene que visitar México y entender de que esto no es Pakistán”, explicó sobre el contenido de una conversación que tuvo con dicho empresario estadunidense en una cena el miércoles pasado.
En diciembre de 2008, la citada publicación dedicó su portada a un reportaje sobre México, donde se vaticinaba “el próximo desastre”. Ahí publicó que la violencia del narcotráfico y la baja de los precios del petróleo indican lo que será “el próximo hundimiento” en el país.
Empeñado en dar una imagen “objetiva” sobre México, Felipe Calderón dedicó en el hotel Post una parte de su conferencia titulada Jinetes ante la tormenta: México superando la crisis, a defender sus políticas en materia de seguridad.
“Estamos golpeando duro” a los zares de las drogas
El Presidente se enorgulleció, como lo ha hecho otras veces, de que “estamos golpeando duro” a los zares de las drogas, que han sido llevados ante la justicia en México y más de 150 han sido extraditados.
Además, aludió a la llamada Operación Limpieza, que –dijo– dio como resultado el encarcelamiento de un ex subprocurador general y de un ex director de la policía federal. Por tanto, “si ustedes ven polvo que sale por las ventanas es porque estamos limpiando la casa”.
El titular del Ejecutivo reiteró que ha establecido tres récords mundiales excepcionales de combate contra el crimen organizado: el aseguramiento de más de 206 millones de dólares en efectivo, la confiscación de medio millón de balas y el descubrimiento de 24 toneladas de cocaína.
En este lujoso destino de turismo alpino, el mandatario mexicano reconoció que el combate al crimen organizado ha sido y continuará siendo una larga y difícil batalla que otros probablemente hubieran preferido evitar. Sin embargo, se mostró confiado en que es la única manera de que México pueda convertirse en un país seguro.
Al exponer un panorama sobre sus estrategias de combate a la delincuencia, dijo que hubiera sido más fácil cerrar los ojos, “pero no lo hicimos”, puesto que decidió emprender acciones fuertes.
En relación con los costos que ha provocado esta lucha, indicó que no hay ninguno más alto que la falta de libertad que pudieran haber sufrido los mexicanos si el gobierno no hubiese tomado acción alguna.
Después, en la sesión de preguntas y respuestas, admitió que es necesario romper la percepción de que el crimen en México está dañando las inversiones y el desempeño de la economía.
En cuanto a la promoción del país explicó que al inicio de su gobierno advirtió que faltaba establecer una estrategia “unificada” y por eso creó Proméxico. Comentó que el Consejo para la Promoción Turística llevó a cabo una campaña especial para promover sitios de sol y playa, pero falta una para cambiar la percepción que prevalece en ciertos círculos stadunidenses.ijo que se requiere una política pública que permita revisar cotidianamente las ventajas comparativas de México con respecto a otros países.
De hecho, reconoció que hace falta una estrategia “muy fuerte” de relaciones públicas para cambiar la percepción sobre México en algunos círculos de Estados Unidos.
“Alguien tiene que hablar con él (Forbes), decir que tiene que visitar México y entender de que esto no es Pakistán”, explicó sobre el contenido de una conversación que tuvo con dicho empresario estadunidense en una cena el miércoles pasado.
En diciembre de 2008, la citada publicación dedicó su portada a un reportaje sobre México, donde se vaticinaba “el próximo desastre”. Ahí publicó que la violencia del narcotráfico y la baja de los precios del petróleo indican lo que será “el próximo hundimiento” en el país.
Empeñado en dar una imagen “objetiva” sobre México, Felipe Calderón dedicó en el hotel Post una parte de su conferencia titulada Jinetes ante la tormenta: México superando la crisis, a defender sus políticas en materia de seguridad.
“Estamos golpeando duro” a los zares de las drogas
El Presidente se enorgulleció, como lo ha hecho otras veces, de que “estamos golpeando duro” a los zares de las drogas, que han sido llevados ante la justicia en México y más de 150 han sido extraditados.
Además, aludió a la llamada Operación Limpieza, que –dijo– dio como resultado el encarcelamiento de un ex subprocurador general y de un ex director de la policía federal. Por tanto, “si ustedes ven polvo que sale por las ventanas es porque estamos limpiando la casa”.
El titular del Ejecutivo reiteró que ha establecido tres récords mundiales excepcionales de combate contra el crimen organizado: el aseguramiento de más de 206 millones de dólares en efectivo, la confiscación de medio millón de balas y el descubrimiento de 24 toneladas de cocaína.
En este lujoso destino de turismo alpino, el mandatario mexicano reconoció que el combate al crimen organizado ha sido y continuará siendo una larga y difícil batalla que otros probablemente hubieran preferido evitar. Sin embargo, se mostró confiado en que es la única manera de que México pueda convertirse en un país seguro.
Al exponer un panorama sobre sus estrategias de combate a la delincuencia, dijo que hubiera sido más fácil cerrar los ojos, “pero no lo hicimos”, puesto que decidió emprender acciones fuertes.
En relación con los costos que ha provocado esta lucha, indicó que no hay ninguno más alto que la falta de libertad que pudieran haber sufrido los mexicanos si el gobierno no hubiese tomado acción alguna.
Después, en la sesión de preguntas y respuestas, admitió que es necesario romper la percepción de que el crimen en México está dañando las inversiones y el desempeño de la economía.
En cuanto a la promoción del país explicó que al inicio de su gobierno advirtió que faltaba establecer una estrategia “unificada” y por eso creó Proméxico. Comentó que el Consejo para la Promoción Turística llevó a cabo una campaña especial para promover sitios de sol y playa, pero falta una para cambiar la percepción que prevalece en ciertos círculos stadunidenses.ijo que se requiere una política pública que permita revisar cotidianamente las ventajas comparativas de México con respecto a otros países.
Claudia Herrera Beltrán, La Jornada, 30 de enero.
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