La Habana, 28 de enero. El presidente de la compañía canadiense Sherritt, Ian Delaney, dijo hoy que le tomó por sorpresa la decisión del gobierno cubano de cancelar el contrato de explotación petrolera de su asociada Pebercan, pero se manifestó confiado en llegar a un arreglo con La Habana.
Delaney tuvo una llamada telefónica múltiple con inversionistas, cuya grabación difundió la empresa, después de dos días de retrocesos en la bolsa de Toronto.
“Como cualquier país en desarrollo, particularmente con los enormes objetivos sociales de Cuba, ellos nunca tienen dinero suficiente, así que siempre estamos dependiendo del ciclo”, señaló Delaney.
Tras un conflicto por una deuda de 108.5 millones de dólares, Cuba canceló el contrato de Pebercan, con lo cual también eliminó parte de las operaciones de Sherritt.
Delaney indicó que no sabía qué solución habría para ese perjuicio colateral, pero aseguró que los cubanos como socios “nunca han abusado de mí hasta ahora y no creo que empiecen a hacerlo”.
Relató que ha hablado con altos funcionarios de la isla, quienes tampoco estuvieron al tanto de la decisión sobre Pebercan. “Esto se hizo a un nivel más bajo que mis contactos”, señaló.
El ejecutivo es un interlocutor de Fidel y Raúl Castro. Sherritt es uno de los principales inversionistas extranjeros en la isla, donde también trabaja en la generación de electricidad con gas y en la extracción de níquel, que según Delaney es “uno de los mejores negocios en el mundo”.
Pebercan dijo que por la cancelación del contrato recibirá de los cubanos 140 millones de dólares, 60 millones de los cuales son para Sherritt.
Delaney tuvo una llamada telefónica múltiple con inversionistas, cuya grabación difundió la empresa, después de dos días de retrocesos en la bolsa de Toronto.
“Como cualquier país en desarrollo, particularmente con los enormes objetivos sociales de Cuba, ellos nunca tienen dinero suficiente, así que siempre estamos dependiendo del ciclo”, señaló Delaney.
Tras un conflicto por una deuda de 108.5 millones de dólares, Cuba canceló el contrato de Pebercan, con lo cual también eliminó parte de las operaciones de Sherritt.
Delaney indicó que no sabía qué solución habría para ese perjuicio colateral, pero aseguró que los cubanos como socios “nunca han abusado de mí hasta ahora y no creo que empiecen a hacerlo”.
Relató que ha hablado con altos funcionarios de la isla, quienes tampoco estuvieron al tanto de la decisión sobre Pebercan. “Esto se hizo a un nivel más bajo que mis contactos”, señaló.
El ejecutivo es un interlocutor de Fidel y Raúl Castro. Sherritt es uno de los principales inversionistas extranjeros en la isla, donde también trabaja en la generación de electricidad con gas y en la extracción de níquel, que según Delaney es “uno de los mejores negocios en el mundo”.
Pebercan dijo que por la cancelación del contrato recibirá de los cubanos 140 millones de dólares, 60 millones de los cuales son para Sherritt.
Gerardo Arreola, la Jornada, 29 de enero.
0 Responses to "Sherritt confía en llegar a un acuerdo con La Habana"
Publicar un comentario