Acuenta gotas, “como un niño chiquito”, el opositor Guillermo Fariñas siguió ayer ingiriendo líquidos en el desmontaje de su huelga de hambre y sed, que duró 135 días, aunque todavía se mantiene en estado “grave crítico” por el coágulo alojado en la parte izquierda del cuello, informó su esposa, Clara Pérez Gómez.
“Está en un proceso de adaptación, los primeros sorbos de agua que tomó el jueves le causaron ardor en el estómago”, informó Pérez Gómez a MILENIO, mientras Fariñas se mantenía “profundamente dormido” por los sedantes proporcionados en el hospital de Santa Clara (centro). “Todos estamos más animados ahora”, agregó la mujer en referencia a la decisión de Fariñas de abandonar su huelga por la “excarcelación de 26 presos enfermos”, luego de que el gobierno anunciara que liberará a 52 opositores, como parte de un acuerdo con la Iglesia católica local. Pérez Gómez dijo que “poco a poco” el tratamiento con anticoagulantes está actuando sobre el trombo alojado en el cuello. Por otra parte, la doctora Oleydis García, esposa de Pablo Pacheco, uno de los cinco primeros presos que, según fuentes españolas, viajarían a España el próximo miércoles, afirmó a MILENIO que la decisión de abandonar la isla fue tomada por ellos desde hace mucho tiempo. “No creemos que dejen a Pablo (periodista independiente) reintegrarse plenamente a la sociedad, nunca pensamos en España, pero ahora se dio esa posibilidad”, declaró.
Médico de profesión y en ejercicio hasta el jueves en un centro hospitalario de Ciego de Ávila (centro), García dijo que desconocía cuándo y cómo se realizará la excarcelación y el viaje, que ambos harán con su hijo de 11 años. Pacheco cumple 20 años de cárcel y tiene 40 de edad.
El canciller español, Miguel Ángel Moratinos reveló que, a diferencia de lo que ocurre con los cubanos que emigran, el acuerdo establece que a los excarcelados que decidan radicarse fuera del país no se les confiscará sus casas, ni se le anularán otros derechos en la isla, aunque sí deberán solicitar permiso al gobierno cubano si deciden regresar.
Para ir al exterior, los cubanos necesitan un permiso de salida del gobierno que dura 11 meses, deben reactivarlo en los consulados con el pago mensual de unos 40 dólares y si no regresan a la isla en ese tiempo pierden hasta su cuota en la cartilla de racionamiento.
La Habana/Manuel Juan Somoza, Milenio, 10 de julio.
“Está en un proceso de adaptación, los primeros sorbos de agua que tomó el jueves le causaron ardor en el estómago”, informó Pérez Gómez a MILENIO, mientras Fariñas se mantenía “profundamente dormido” por los sedantes proporcionados en el hospital de Santa Clara (centro). “Todos estamos más animados ahora”, agregó la mujer en referencia a la decisión de Fariñas de abandonar su huelga por la “excarcelación de 26 presos enfermos”, luego de que el gobierno anunciara que liberará a 52 opositores, como parte de un acuerdo con la Iglesia católica local. Pérez Gómez dijo que “poco a poco” el tratamiento con anticoagulantes está actuando sobre el trombo alojado en el cuello. Por otra parte, la doctora Oleydis García, esposa de Pablo Pacheco, uno de los cinco primeros presos que, según fuentes españolas, viajarían a España el próximo miércoles, afirmó a MILENIO que la decisión de abandonar la isla fue tomada por ellos desde hace mucho tiempo. “No creemos que dejen a Pablo (periodista independiente) reintegrarse plenamente a la sociedad, nunca pensamos en España, pero ahora se dio esa posibilidad”, declaró.
Médico de profesión y en ejercicio hasta el jueves en un centro hospitalario de Ciego de Ávila (centro), García dijo que desconocía cuándo y cómo se realizará la excarcelación y el viaje, que ambos harán con su hijo de 11 años. Pacheco cumple 20 años de cárcel y tiene 40 de edad.
El canciller español, Miguel Ángel Moratinos reveló que, a diferencia de lo que ocurre con los cubanos que emigran, el acuerdo establece que a los excarcelados que decidan radicarse fuera del país no se les confiscará sus casas, ni se le anularán otros derechos en la isla, aunque sí deberán solicitar permiso al gobierno cubano si deciden regresar.
Para ir al exterior, los cubanos necesitan un permiso de salida del gobierno que dura 11 meses, deben reactivarlo en los consulados con el pago mensual de unos 40 dólares y si no regresan a la isla en ese tiempo pierden hasta su cuota en la cartilla de racionamiento.
La Habana/Manuel Juan Somoza, Milenio, 10 de julio.
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