Soportar amenazas, difamaciones, presiones, guerra sucia, lluvia, frío, calor y cansancio tiene una recompensa millonaria.
Los 12 candidatos que pelean hoy una gubernatura tendrán acceso al manejo de más de 350 mil millones de pesos de presupuesto anual, lo que representa 31.37 por ciento del total de los recursos destinados a las entidades federativas.
De acuerdo con las cifras oficiales de los presupuestos aprobados por los congresos estatales, ese es el monto que fue asignado este 2010 a las administraciones locales que están por renovarse.
Los cinco estados con más gasto asignado son los que han vivido procesos electorales más polémicos: Veracruz, Puebla, Oaxaca, Chihuahua y Sinaloa.
El sexto lugar lo ocupa Tamaulipas, donde recientemente fue asesinado el candidato del PRI al Gobierno del estado, Rodolfo Torre Cantú.
En el caso de Veracruz, su presupuesto anual rebasa los 70 mil millones de pesos, producto de un incremento en términos reales de 6.4 por ciento, impulsado desde la Cámara de Diputados por quien ahora es el candidato del PRI al Gobierno del estado, Javier Duarte.
Para Puebla, el gasto anual aprobado este año supera los 48 mil 800 millones de pesos, que también representan un crecimiento del 6.3 por ciento frente a lo que se ejerció el año pasado.
En Oaxaca, el Gobierno de Ulises Ruiz tiene a su disposición 38 mil 809 millones de pesos, que representan un crecimiento real de gasto en relación a 2009, incremento que fue cabildeado personalmente por el que fuera coordinador de la diputación Eviel Pérez Magaña, abanderado del PRI en la entidad.
Para Chihuahua, el próximo gobernador tendrá en sus manos el manejo más de 37 mil 173 millones de pesos, mientras que en caso de Sinaloa, la cifra alcanza los 29 mil 950 millones de pesos.
De acuerdo con algunos legisladores, la intensidad de las contiendas electorales está definitivamente marcada por los intereses económicos y el manejo discrecional del presupuesto que tienen los estados.
Aunque la mayoría de los candidatos han ofrecido transparencia y rendición de cuentas, el marco legal y el poder de los mandatarios sobre los órganos de fiscalización permiten que ese dinero permanezca en la opacidad.
Legisladores del PAN y PRD en el Congreso de la Unión han propuesto diversas reformas a las leyes de Presupuesto y Coordinación Fiscal para incrementar el número de candados en el uso de los recursos en los estados que son, en su mayoría, participaciones y aportaciones federales.
En la última discusión del Paquete Económico 2010, el Gobierno federal - a través de la Secretaría de Hacienda- fracasó en su intento de imponer nuevos candados para controlar el ejercicio del gasto de los gobernadores que hoy son acusados de desviar parte de ese dinero a las campañas electorales..
Los 12 candidatos que pelean hoy una gubernatura tendrán acceso al manejo de más de 350 mil millones de pesos de presupuesto anual, lo que representa 31.37 por ciento del total de los recursos destinados a las entidades federativas.
De acuerdo con las cifras oficiales de los presupuestos aprobados por los congresos estatales, ese es el monto que fue asignado este 2010 a las administraciones locales que están por renovarse.
Los cinco estados con más gasto asignado son los que han vivido procesos electorales más polémicos: Veracruz, Puebla, Oaxaca, Chihuahua y Sinaloa.
El sexto lugar lo ocupa Tamaulipas, donde recientemente fue asesinado el candidato del PRI al Gobierno del estado, Rodolfo Torre Cantú.
En el caso de Veracruz, su presupuesto anual rebasa los 70 mil millones de pesos, producto de un incremento en términos reales de 6.4 por ciento, impulsado desde la Cámara de Diputados por quien ahora es el candidato del PRI al Gobierno del estado, Javier Duarte.
Para Puebla, el gasto anual aprobado este año supera los 48 mil 800 millones de pesos, que también representan un crecimiento del 6.3 por ciento frente a lo que se ejerció el año pasado.
En Oaxaca, el Gobierno de Ulises Ruiz tiene a su disposición 38 mil 809 millones de pesos, que representan un crecimiento real de gasto en relación a 2009, incremento que fue cabildeado personalmente por el que fuera coordinador de la diputación Eviel Pérez Magaña, abanderado del PRI en la entidad.
Para Chihuahua, el próximo gobernador tendrá en sus manos el manejo más de 37 mil 173 millones de pesos, mientras que en caso de Sinaloa, la cifra alcanza los 29 mil 950 millones de pesos.
De acuerdo con algunos legisladores, la intensidad de las contiendas electorales está definitivamente marcada por los intereses económicos y el manejo discrecional del presupuesto que tienen los estados.
Aunque la mayoría de los candidatos han ofrecido transparencia y rendición de cuentas, el marco legal y el poder de los mandatarios sobre los órganos de fiscalización permiten que ese dinero permanezca en la opacidad.
Legisladores del PAN y PRD en el Congreso de la Unión han propuesto diversas reformas a las leyes de Presupuesto y Coordinación Fiscal para incrementar el número de candados en el uso de los recursos en los estados que son, en su mayoría, participaciones y aportaciones federales.
En la última discusión del Paquete Económico 2010, el Gobierno federal - a través de la Secretaría de Hacienda- fracasó en su intento de imponer nuevos candados para controlar el ejercicio del gasto de los gobernadores que hoy son acusados de desviar parte de ese dinero a las campañas electorales..
Claudia Guerrero, Reforma, 4 de julio.
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