Apuesta SRE a pragmatismo

Ante la resistencia a ceder en los temas que implican afectaciones en el crecimiento económico, las negociaciones de la 16 Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP-16) deben ser encaradas con pragmatismo, consideró Luis Alfonso de Alba, representante Especial para Cambio Climático de la Cancillería mexicana.

La comunidad científica, señaló en entrevista, está demandando un compromiso claro para reducir hasta en 25 por ciento las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero (GEI).

Sin embargo, advirtió, a dos semanas de la Cumbre de Cancún, la oferta de los países desarrollados se ubica en el rango de 14 a 18 por ciento.

"Se explica porque ningún país quiere tener condiciones adversas, sobre todo cuando se trata de temas que afectan de manera directa el nivel de desarrollo del país y el comercio internacional. Ningún país quiere tener desventaja frente a sus pares y por eso quiere que todos entren. De ahí el valor de que el acuerdo sea universal y no de unos cuantos", comentó el funcionario.

La COP-16, remarcó, no producirá ningún acuerdo vinculante ni resolverá necesariamente el futuro del Protocolo de Kyoto.

No obstante, sostuvo, se pueden dar pasos concretos para avanzar en la adopción de medidas específicas para enfrentar el cambio climático y sentar las bases para un nuevo pacto global.

"Cancún tiene que ser un ejercicio de pragmatismo y de realismo, porque de nada nos sirve llegar a una conferencia con nivel de ambición o aspiración que no se pueda concretar y se traduzca en inacción", insistió.

"Si no llegamos con un 25 por ciento de reducción de los países desarrollados a Cancún yo no creo que estemos en la línea equivocada. Por lo menos tenemos para escoger el 18 por ciento de compromiso que está sobre la mesa y así dar certidumbre al proceso".

De Alba consideró acertada la meta planteada por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climática (IPCC, por sus siglas en inglés) para reducir a un máximo de entre 1.5 y 2 grados centígrados el incremento en la temperatura del planeta.

Sin embargo, advirtió, el negociador oficial, difícilmente se logrará un consenso en la materia antes de 2015.

"Con base en los informes de carácter técnico sabemos que para que la temperatura no rebase los 2 grados centígrados se requiere mantener el volumen de gases en un determinado nivel", indicó el diplomático.

De lo que se trata, agregó, es de que cada país comprenda el equilibrio que debe existir entre responsabilidad y capacidad; después de ello viene la parte de transparentar lo que se hace.

"No es evaluar políticas, sino poder cuantificar el esfuerzo que está haciendo la comunidad internacional en lo colectivo, no en lo individual", detalló.


La agenda

La mesa de discusión de la Cumbre de Cancún, señaló De Alba, tiene cuatro patas: reducción de emisiones, incluyendo el esquema de mitigación, reporte y verificación (MRV), financiamiento, adaptación y tecnología.

En materia de adaptación y tecnología, sostuvo, existe amplio consenso. El problema, advirtió, es que para avanzar en esos temas se requiere la creación de un fondo para apoyar económicamente a los países menos desarrollados.

Si bien la propuesta mexicana de crear un "fondo verde" fue aceptada en la Cumbre de Copenhague, explicó, falta darle personalidad jurídica y dotarlo de un mecanismo financiero específico.

Reconoció que la idea de establecer un sistema de cuotas para los países desarrollados, planteada por México, no ha logrado consenso.

Respecto al Protocolo de Kyoto, subrayó que Cancún no es el escenario adecuado para decidir qué hacer con ese instrumento.

Países como Japón y Rusia, explicó, que no quieren que el convenio continúe, mientras que otros piden crear un mecanismo que incluya a Estados Unidos, China y naciones en desarrollo.

"Hay que ver que el Protocolo de Kyoto no termina en 2012. Lo que termina es el primer periodo de compromisos, pero el mecanismo continúa operando. Ahí es donde buscamos el equilibrio, entre lo que sería un mensaje de continuidad y en paralelo el volumen de reducción de emisiones, y que se incluya a los países en desarrollo", comentó.

Por ahora, concluyó las negociaciones con miras a la Cumbre de Cancún han arrojado diversos textos sueltos que identifican componentes para la preservación del medio ambiente.

"La propuesta ahora es que par el final de Cancún se cuente con un paquete de decisiones que tiene que mantener el equilibrio entre el Protocolo de Kyoto y la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático", señaló.




Conózcalo

Lugar de nacimiento: Lagos de Moreno, Jalisco

Edad: 53 años

Formación: Licenciatura en Relaciones Internacionales en el Institut d'Etudes de Relations Internationales de París.

Experiencia: Miembro del Servicio Exterior Mexicano desde 1983. Tercer Secretario la Misión de México ante las Naciones Unidas. Representante permanente alterno ante la Organización de Estados Americanos. Embajador ante los organismos internaciones ubicados en Ginebra. Presidente del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Ariadna García, La Jornada, 14 de noviembre.

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