La Iglesia critica política ambiental

La jerarquía de la Iglesia católica en México cuestionó al gobierno del presidente Felipe Calderón, al considerar que presentarán “posibles soluciones al grave problema ambiental cuando no han hecho nada, desde su posición, para mejorar el desastre ecológico que impera en nuestro país”.

Bajo el título “La reunión de Cancún”, la Iglesia planteó su postura en el semanario Desde la Fe, respecto a la Cumbre Mundial sobre Calentamiento Global que se realizará a partir de mañana en Cancún.

“Nos encontramos con personajes oportunistas, en todos los niveles de gobierno, que sólo buscan el lucimiento personal y llevar agua a su molino, sin ningún compromiso real con la causa ecológica”, señala.

La Iglesia afirma que son “muchísimos” los pendientes ecológicos que están por resolverse en la materia, no sólo en la ciudad de México sino en el país. Y que “más que la presencia de oportunistas en la Cumbre de Cancún, se necesitan compromisos urgentes y sinceros de solución” ante este tema.

La Iglesia cuestionó: “¿Dónde están las acciones concretas para conservar los bosques de nuestra atribulada patria? ¿Dónde están las acciones reales para recuperar los ríos y cañadas tan importantes para la vida futura de los mexicanos? ¿Qué propuesta podemos presentar cuando no hemos podido encontrar una solución al enorme problema de la basura y a su procesamiento adecuado?”.

En la cumbre, la organización Cáritas llevará la representación y postura de la Iglesia católica. La Iglesia “urgirá” a los gobiernos del mundo a comprometerse en dos temas: “El financiamiento para proteger a la comunidades más vulnerables víctimas del cambio climático” y lograr un acuerdo “ambicioso y vinculante” a partir de lo que establece el protocolo de Kioto.

A través de esa organización, la Iglesia realiza una labor social de apoyo a las poblaciones víctimas de desastres naturales o de emergencias como consecuencia de los fenómenos naturales que se han presentado ante los cambios climatológicos.

El cardenal Norberto Rivera, en la misa que ofició en la Catedral Metropolitana, llamó la atención a los fieles a “no perder la esperanza” y a reflexionar sobre la manera en que se educa a las nuevas generaciones.

Explicó que si se educa a los niños y jóvenes en la “búsqueda egoísta de su propio placer e interés” no debe haber sorpresa cuando se desentiendan.

Nurit Martínez, El Universal, 29 de noviembre.