El reto para los próximos años es llegar a una economía baja en carbono y aplicar masivamente sistemas de desarrollo limpio en movilidad motorizada y en la industria, coincidieron alcaldes de diversas ciudades del mundo.
Los gobernantes Antonio Costa, de Lisboa, Portugal; Wan Qingliang, de Guangzhou, China; Amos Masando, de Johannesburgo, Sudáfrica, y Oh Se-hoon, Seúl, Corea. también destacaron la necesidad de impulsar desarrollos inmobiliarios inteligentes o sustentables y abatir la desigualdad y modelos económicos que sólo radicalizan la polarización de pobres y ricos.
Al participar en la Cumbre Mundial de Líderes Locales y regionales 2010, este grupo de autoridades indicaron que la crisis económica global golpeó severamente sus estructuras sociales, pero a la vez se abrieron espacios de oportunidad para innovar en el terreno social, industrial, financiero y de desarrollo limpio.
"La crisis mundial de 2008 nos afectó con desempleo y una baja inversión en todos los sectores, y ante esto el gobierno tuvo que innovar con medidas que permitieran reactivar la economía con apoyos fiscales y estableciendo lazos de cooperación entre todos los sectores para salir adelante", dijo Wan Qingliang.
Dijo que también están desarrollando sistemas de energía eólica y nuclear para ir sustituyendo el uso del combustible fósil en el desarrollo de la Ciudad.
En tanto, Oh Se-hoon, reconoció que los retos son alcanzar una economía baja en carbono y un desarrollo sustentable, pero también advirtió que los gobiernos locales deben empezar a preparar sus sistemas sociales para atender a una población cada vez más adulta y anciana, pues en el caso de Corea se han disparado los casos de demencia senil por el incremento de la población mayor de 60 años.
"Debemos estar preparados para dar atención a una población que va envejeciendo, y hay que garantizarle salud, empleo y entretenimiento", añadió.
Amos Masando precisó que el desafío más importante es el cambio climático, pues con este fenómeno se acrecentará la pobreza, la desigualdad y los impactos al sector rural serán mayores provocando una mayor migración a las ciudades.
También recomendó apostarle a una movilidad baja en carbono, a conservar las áreas verdes, el agua, así como a planear desarrollos urbanos cada vez más limpios.
A esta ideas se sumó, Antonio Costa, quien manifestó que se debe revisar a fondo el modelo económico mundial que rige a muchas naciones, pues no la desigualdad, la pobreza y el desarrollo altamente contaminante no puede seguir así.
Los gobernantes Antonio Costa, de Lisboa, Portugal; Wan Qingliang, de Guangzhou, China; Amos Masando, de Johannesburgo, Sudáfrica, y Oh Se-hoon, Seúl, Corea. también destacaron la necesidad de impulsar desarrollos inmobiliarios inteligentes o sustentables y abatir la desigualdad y modelos económicos que sólo radicalizan la polarización de pobres y ricos.
Al participar en la Cumbre Mundial de Líderes Locales y regionales 2010, este grupo de autoridades indicaron que la crisis económica global golpeó severamente sus estructuras sociales, pero a la vez se abrieron espacios de oportunidad para innovar en el terreno social, industrial, financiero y de desarrollo limpio.
"La crisis mundial de 2008 nos afectó con desempleo y una baja inversión en todos los sectores, y ante esto el gobierno tuvo que innovar con medidas que permitieran reactivar la economía con apoyos fiscales y estableciendo lazos de cooperación entre todos los sectores para salir adelante", dijo Wan Qingliang.
Dijo que también están desarrollando sistemas de energía eólica y nuclear para ir sustituyendo el uso del combustible fósil en el desarrollo de la Ciudad.
En tanto, Oh Se-hoon, reconoció que los retos son alcanzar una economía baja en carbono y un desarrollo sustentable, pero también advirtió que los gobiernos locales deben empezar a preparar sus sistemas sociales para atender a una población cada vez más adulta y anciana, pues en el caso de Corea se han disparado los casos de demencia senil por el incremento de la población mayor de 60 años.
"Debemos estar preparados para dar atención a una población que va envejeciendo, y hay que garantizarle salud, empleo y entretenimiento", añadió.
Amos Masando precisó que el desafío más importante es el cambio climático, pues con este fenómeno se acrecentará la pobreza, la desigualdad y los impactos al sector rural serán mayores provocando una mayor migración a las ciudades.
También recomendó apostarle a una movilidad baja en carbono, a conservar las áreas verdes, el agua, así como a planear desarrollos urbanos cada vez más limpios.
A esta ideas se sumó, Antonio Costa, quien manifestó que se debe revisar a fondo el modelo económico mundial que rige a muchas naciones, pues no la desigualdad, la pobreza y el desarrollo altamente contaminante no puede seguir así.
Alejandro Ramos, Reforma, 19 de noviembre.
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