Tapachula, Chis., 31 de octubre. Mujeres de la Asociación Red de Comités de Migrantes y Familiares de Honduras (Comifah) llegaron a Tecún Umán, uno de los ocho cruces fronterizos formales entre México y Guatemala, en busca sus hijos, hijas y otros familiares, que suman cerca de mil indocumentados que han desaparecido en México.
Aseguraron que la búsqueda que emprendieron hace seis años se ha vuelto apremiante porque la delincuencia organizada ha intensificado los secuestros de migrantes para explotarlos sexualmente o como mano de obra, extorsionarlos y, en fechas recientes, para actividades delictivas.
“Los desaparecidos han aumentado día con día. Iniciamos con la búsqueda de unas 50 personas; ahora tenemos, sólo de Honduras, una lista de 860. Localizamos a 36. Uno es un niño de 15 años que era obligado a trabajar en la ciudad de México como esclavo”, afirmó Ián Quiroz, coordinadora de la caravana de madres y familiares de los migrantes desaparecidos.
Dijo que tras la masacre de los 72 migrantes en Tamaulipas, (la mayoría hondureños) “nuestro país se puso en duelo, pero también vimos en este caso una oportunidad para denunciar las extorsiones, los secuestros y las muertes de nuestros compatriotas, porque esta situación no es de ahora; viene de hace años”, puntualizó la activista.
Explicó que, junto con organizaciones como el Movimiento Migrante Mesoamericano, el Tribunal Internacional de Conciencia de los Pueblos en Movimiento y los participantes en el Foro Mundial Alternativo de los Pueblos en Movimiento, exigirán que se firmen acuerdos internacionales que permitan a los migrantes transitar por el país con seguridad.
Las mujeres de la Rred Comifah se unirán a organizaciones similares de El Salvador y Guatemala que y solicitan hablar con el presidente Felipe Calderón Hinojosa y con legisladores federales y buscan migrantes que han desaparecido en México.
Lidia Mara Souza, religiosa integrante de la Pastoral de Movilidad Humana, explicó que iniciaron la búsqueda en Tapachula, porque aquí “se les vio por última ocasión”. En esta ciudad los familiares de los migrantes colocaron fotografías de los desaparecidos y pidieron a habitantes que les ayuden a encontrarlos. La caravana visitará albergues en las ciudades de Arriga, Chiapas, e Ixtepec, Oaxaca.
En Ocosingo, comunidades de ex refugiados guatemaltecos de Ixcán Grande instalaron una ofrenda y un monumento para recordar a 108 fallecidos que estuvieron en el campamento Puerto Rico en la década de 1980, cuando cruzaron la frontera para huir de la represión en su país.
Antes de que se firmara la paz, 108 personas murieron a causa de la desnutrición y enfermedades como pulmonía, paludismo, tuberculosos, hepatitis, tétanos y gastroenteritis.
Aseguraron que la búsqueda que emprendieron hace seis años se ha vuelto apremiante porque la delincuencia organizada ha intensificado los secuestros de migrantes para explotarlos sexualmente o como mano de obra, extorsionarlos y, en fechas recientes, para actividades delictivas.
“Los desaparecidos han aumentado día con día. Iniciamos con la búsqueda de unas 50 personas; ahora tenemos, sólo de Honduras, una lista de 860. Localizamos a 36. Uno es un niño de 15 años que era obligado a trabajar en la ciudad de México como esclavo”, afirmó Ián Quiroz, coordinadora de la caravana de madres y familiares de los migrantes desaparecidos.
Dijo que tras la masacre de los 72 migrantes en Tamaulipas, (la mayoría hondureños) “nuestro país se puso en duelo, pero también vimos en este caso una oportunidad para denunciar las extorsiones, los secuestros y las muertes de nuestros compatriotas, porque esta situación no es de ahora; viene de hace años”, puntualizó la activista.
Explicó que, junto con organizaciones como el Movimiento Migrante Mesoamericano, el Tribunal Internacional de Conciencia de los Pueblos en Movimiento y los participantes en el Foro Mundial Alternativo de los Pueblos en Movimiento, exigirán que se firmen acuerdos internacionales que permitan a los migrantes transitar por el país con seguridad.
Las mujeres de la Rred Comifah se unirán a organizaciones similares de El Salvador y Guatemala que y solicitan hablar con el presidente Felipe Calderón Hinojosa y con legisladores federales y buscan migrantes que han desaparecido en México.
Lidia Mara Souza, religiosa integrante de la Pastoral de Movilidad Humana, explicó que iniciaron la búsqueda en Tapachula, porque aquí “se les vio por última ocasión”. En esta ciudad los familiares de los migrantes colocaron fotografías de los desaparecidos y pidieron a habitantes que les ayuden a encontrarlos. La caravana visitará albergues en las ciudades de Arriga, Chiapas, e Ixtepec, Oaxaca.
En Ocosingo, comunidades de ex refugiados guatemaltecos de Ixcán Grande instalaron una ofrenda y un monumento para recordar a 108 fallecidos que estuvieron en el campamento Puerto Rico en la década de 1980, cuando cruzaron la frontera para huir de la represión en su país.
Antes de que se firmara la paz, 108 personas murieron a causa de la desnutrición y enfermedades como pulmonía, paludismo, tuberculosos, hepatitis, tétanos y gastroenteritis.
Ángeles Mariscal, La Jornada, 1º de noviembre.
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