La titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Patricia Espinosa Cantellano, afirmó que en las negociaciones y encuentros oficiales con representantes del gobierno de Estados Unidos nunca se ha hecho referencia al término narcoinsurgencia, y sostuvo que la agenda con el Congreso de ese país “se mantiene en función de nuestros intereses”.
Entrevistada después de su participación en la asamblea del Foro Interparlamentario de las Américas), que se realizó en la Cámara de Senadores, la canciller sostuvo que trabaja en la reafirmación y el fortalecimiento de la cooperación entre ambos países, así como para “lograr “el reconocimiento permanente de que debe haber una responsabilidad compartida para combatir el narcotráfico y el crimen organizado”.
Por otra parte, en la sesión de este jueves en la Cámara de Senadores, PRI, PAN y PRD presentarán un punto de acuerdo en el que demandan al Presidente de la República que promueva ante el gobierno de Estados Unidos una redefinición de los términos de la Iniciativa Mérida, porque el documento contiene cláusulas de corte injerencista, además de la pretensión de certificar al Ejército Mexicano.
La propuesta, impulsada por los senadores Rosario Green y Francisco Labastida Ochoa, del PRI; Felipe González, del PAN, y Graco Ramírez, del PRD, propone un nuevo esquema de cooperación bilateral que reconozca al narcotráfico como un fenómeno común y garantice que México reciba también información sistemática y fidedigna sobre los esfuerzos que realiza Washington para combatir el tráfico de armas hacia nuestro país.
En el punto de acuerdo argumentan que incluso el Congreso de Estados Unidos congeló 26 millones de dólares de la iniciativa Mérida –que ya estaban comprometidos– hasta que México cumpla requisitos específicos, como la prohibición de la tortura y la obligación de procesar a militares y policías que atenten contra las garantías individuales.
En entrevista, la secretaria de Relaciones Exteriores rechazó que la nueva conformación en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, donde ahota tiene la mayoría el Partido Republicano, repercuta en la agenda bilateral con México.
“La agenda no depende de quiénes estén en un momento asumiendo las responsabilidades en ese país; se rige por los intereses nacionales y tiene que ver con el tema de migración, tráfico de armas y de dinero en efectivo; con seguridad, competitividad y mejoramiento en la infraestructura fronteriza.”
Al preguntarle acerca de la cancelación de viajes de turistas “canadienses a Cancún, después de la explosión que ocurrió en un hotel el domingo pasado, Espinosa Cantellano subrayó: “No tenemos en este momento datos que permitan confirmar si eso esté ocurriendo. Vamos a tocar base con la Secretaría de Turismo y con los propios hoteleros para conocer la situación”.
Manifestó que ha estado en contacto de manera estrecha con las autoridades canadienses en el lugar, atendiendo a los vacacionistas y brindándoles asistencia en los casos en que adoptaron la decisión de regresar de inmediato a su país.
Entrevistada después de su participación en la asamblea del Foro Interparlamentario de las Américas), que se realizó en la Cámara de Senadores, la canciller sostuvo que trabaja en la reafirmación y el fortalecimiento de la cooperación entre ambos países, así como para “lograr “el reconocimiento permanente de que debe haber una responsabilidad compartida para combatir el narcotráfico y el crimen organizado”.
Por otra parte, en la sesión de este jueves en la Cámara de Senadores, PRI, PAN y PRD presentarán un punto de acuerdo en el que demandan al Presidente de la República que promueva ante el gobierno de Estados Unidos una redefinición de los términos de la Iniciativa Mérida, porque el documento contiene cláusulas de corte injerencista, además de la pretensión de certificar al Ejército Mexicano.
La propuesta, impulsada por los senadores Rosario Green y Francisco Labastida Ochoa, del PRI; Felipe González, del PAN, y Graco Ramírez, del PRD, propone un nuevo esquema de cooperación bilateral que reconozca al narcotráfico como un fenómeno común y garantice que México reciba también información sistemática y fidedigna sobre los esfuerzos que realiza Washington para combatir el tráfico de armas hacia nuestro país.
En el punto de acuerdo argumentan que incluso el Congreso de Estados Unidos congeló 26 millones de dólares de la iniciativa Mérida –que ya estaban comprometidos– hasta que México cumpla requisitos específicos, como la prohibición de la tortura y la obligación de procesar a militares y policías que atenten contra las garantías individuales.
En entrevista, la secretaria de Relaciones Exteriores rechazó que la nueva conformación en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, donde ahota tiene la mayoría el Partido Republicano, repercuta en la agenda bilateral con México.
“La agenda no depende de quiénes estén en un momento asumiendo las responsabilidades en ese país; se rige por los intereses nacionales y tiene que ver con el tema de migración, tráfico de armas y de dinero en efectivo; con seguridad, competitividad y mejoramiento en la infraestructura fronteriza.”
Al preguntarle acerca de la cancelación de viajes de turistas “canadienses a Cancún, después de la explosión que ocurrió en un hotel el domingo pasado, Espinosa Cantellano subrayó: “No tenemos en este momento datos que permitan confirmar si eso esté ocurriendo. Vamos a tocar base con la Secretaría de Turismo y con los propios hoteleros para conocer la situación”.
Manifestó que ha estado en contacto de manera estrecha con las autoridades canadienses en el lugar, atendiendo a los vacacionistas y brindándoles asistencia en los casos en que adoptaron la decisión de regresar de inmediato a su país.
Víctor Ballinas y Andrea Becerril, La Jornada, 18 de noviembre.
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