Arremete Yo Soy 132 contra seguidores y convoy de Peña Nieto

Jóvenes auto declarados integrantes del movimiento Yo Soy 132 llevaron ayer su protesta en contra de Enrique Peña Nieto al extremo de enfrentarse a golpes con simpatizantes del candidato presidencial del PRI, en el que constituyó el acto más violento hasta ahora de los agresores, quienes arrojaron piedras contra el convoy del mexiquense.

Las violentas personas llegaron a unos metros de Peña Nieto y amenazaron con escalar aún más su desatada protesta, además de que luego del enfrentamiento aquí —y antes en el municipio de Izúcar de Matamoros—, se dijeron víctimas de los seguidores del ex gobernador mexiquense y del cuerpo de seguridad de éste.

Luego de su arribo a Tepeaca, ya que había abordado junto a su comitiva el convoy de vehículos que les llevaría al lugar del evento, a unos 100 metros de distancia del helipuerto en que poco antes había descendido, cerca de 200 supuestos estudiantes que ya le esperaban, pasaron de las consignas al lanzamiento de palos y piedras contra los automóviles del candidato.

Luego de que los cuatro vehículos del convoy salieron literalmente huyendo del lugar donde fueron atacados, los sedicentes integrantes de aquel movimiento se lanzaron contra el contingente de simpatizantes peñistas, entre quienes se encontraba el diputado del PRI, David Huerta, quien recibió algunos golpes en cara y cuerpo, sin reportes de lesiones mayores.

Antes de este incidente, en Izúcar de Matamoros, otro grupo de entre 30 y 40 alumnos del Cebetis y quienes habían llegado antes del evento proselitista, buscaron bloquear los accesos del acto, pero fueron impedidos por personal de seguridad.

Sin embargo, los estudiantes que portaban mantas con las leyendas tales como “Peña asesino” e “Izúcar no te quiere”, fueron replegados dos cuadras antes por los elementos de seguridad del candidato, lo que dio lugar a un enfrentamiento a golpes.

En Tepeaca el contingente de jóvenes se desplegó en distintos puntos, tanto en las calles del trayecto del convoy del candidato priista —del helipuerto a la plaza central—, como en el kiosko de la plaza central, donde se desarrolló el evento, y en algunas salidas de los invitados.

En Izúcar de Matamoros la agresión ocurrió sobre la confluencia de Calle 2 esquina con Cuauhtémoc, donde las piedras y palos estallaron aún contra vehículos estacionados que nada tenían que ver con el convoy del candidato.

En el sitio, a espaldas del helipuerto, las camionetas del convoy salieron a toda velocidad a fin de evitar las agresiones.

Posteriormente, en el kiosko de la plaza central de Tepeaca, un centenar de integrantes del movimiento estudiantil se infiltró en el contingente de invitados, pero fueron detectados antes de comenzar el evento y fueron replegados, lo que significó un nuevo enfrentamiento a golpes y jaloneos.

Esto se debió a que un grupo de simpatizantes del PRI provenientes del municipio de Zaragoza saltó las vallas de seguridad, lo que fue contenido por personal y otros seguidores del movimiento, lo que originó una gresca entre los mismos priistas, que fue disipado en breves momentos.

En el lugar de los hechos, algunos manifestantes fueron identificados con credenciales de estudiantes, entre ellos los hermanos Manuel y Jaime Contreras Gil, el primero de la UNAM, y el segundo de la Universidad Siglo 21 de Puebla.

Cabe destacar que entre la confusión, niños, mujeres y jóvenes, en su intento de correr, sufrieron pisotones y recibieron algunos golpes.


Luciano Franco en Tepeaca, Puebla, Reforma, 13 de junio.

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