Matan a simpatizante panista en Chiapas tras un incidente

Edgardo Hernández Corzo, simpatizante del PAN, fue asesinado a tiros ayer por la madrugada por una persona que le disparó desde la camioneta donde viajaba el candidato del PRI a la alcaldía de Villaflores, Chiapas, Ulises Grajales Niño.

Los hechos ocurrieron alrededor de las dos de la mañana en el tramo carretero Villaflores-Ocozocuautla, a la altura del rancho-restaurante El Sinaloense.

En ese lugar, la camioneta en la que viajaba el candidato del PRI, Ulises Grajales Niño, le dio alcance a otra tipo Ram, en la que viajaban dos personas con quienes horas antes el equipo del priista había tenido un incidente en la comunidad Guadalupe Victoria.

Versiones de testigos señalan que alrededor de las 10 de la noche del domingo, mientras pegaban propaganda electoral del PAN, Edgardo —de 36 años de edad y sobrino del candidato a diputado federal por el X distrito electoral, Roger de Coss Corzo— y Manuel Antonio Corzo Rojas, tuvieron un roce verbal con un guardaespaldas de Grajales Niño.

Horas después, cuando ya iban en carretera, la camioneta Tahoe color negro de Grajales Niño le dio alcance la Ram blanca en la que viajaban los simpatizantes del PAN, y tan pronto los tuvieron cerca empezaron a dispararles.

Manuel Antonio Corzo Rojas era el conductor de la unidad; Edgardo el copiloto. Al ver ensangrentado a su compañero, el chofer aceleró y lanzó la camioneta contra la puerta del rancho, propiedad de su familia.

Un reporte de la Policía Estatal Preventiva (PEP) señaló, sin embargo, que alrededor de las 3:30 horas fue una llamada del candidato Grajales Niño, quien solicitó ayuda porque —según dijo—  en el rancho referido fue víctima de un intento de secuestro.

Elementos de la Secretaría de Seguridad fueron al encuentro con Grajales Niño, quien ya se encontraba en el hospital regional "Bicentenario".

El candidato aseguró que logró escapar del rancho donde pretendían secuestrarlo y explicó que había acudido al sitio del incidente con los panistas porque le informaron que estaban robando lonas de propaganda.

Fue hasta que agentes policiacos arribaron al rancho El Sinaloense cuando se conocieron detalles del crimen.

Grupos de ciudadanos se indignaron por el asesinato y empezó a reclamar justicia en la vía pública, por lo cual la policía tuvo que resguardar la casa del candidato.

A decir de Manuel Antonio Corzo —conductor de la unidad baleada— fue el propio Grajales Niño quien disparó.


La Crónica, 12 de junio.