AMLO suelta al PRD; su partido será Morena

Después de 23 años de militancia, Andrés Manuel López Obrador se separó del PRD y convocó a convertir el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en un partido político que –dijo— buscará definir su plataforma político-electoral para ayudar a las mejores causas del país, además de contender en las elecciones intermedias del 2015, cuando se renovará la Cámara de Diputados.

Con la ausencia de la dirigencia nacional del PRD, López Obrador perfiló su plan de “desobediencia civil” tras el fallo del Tribunal Electoral que validó la contienda presidencial del 1 de julio. “Reitero, no voy a reconocer a Peña Nieto como presidente legítimo de México”, expresó.

Luego adelantó que “de manera pacífica” se opondrá con todo, a las reformas estructurales como la fiscal, laboral y la energética, y advirtió que no permitirá la privatización de Pemex.

Sostuvo que el actual régimen “está en su fase terminal”, y en seguida apuntó:

“A los hombres del régimen solo les queda el dinero y el aparato de manipulación y de fuerza, pero el control que ejercen los potentados a través de los medios de comunicación es, cada vez, menos determinante”.

En el proceso electoral, prosiguió, “pensaron que bastaba con la publicidad, con lo mediático, y no les resultó, tuvieron que recurrir a la compra de voluntades”.

Entre aplausos de sus huestes, el tabasqueño aseguró que su separación del PRD no se trata de una ruptura con este partido ni con el PT o el Movimiento Ciudadano. La decisión, sostuvo, fortalecerá a la izquierda, y se comprometió a “seguir caminando juntos” para alcanzar acuerdos.

Tras de advertir que “lucharemos toda la vida hasta alcanzar el objetivo superior de transformar a México”, dijo que en esta nueva etapa de su vida “voy a dedicar toda mi imaginación y trabajo a la causa de la transformación de México.

AUSENCIAS. Ante un Zócalo que no lució lleno al tope como en otras ocasiones, López Obrador aseguró que “tiene muchos amigos en el PRD”, y afirmó que dio lo mejor de sí a ese partido, al que  representó “con entrega y dignidad”,  incluidas las veces que lo postuló a la Presidencia. Por ello consideró que está a mano con el sol azteca.

“Considero que les di lo mejor de mí y los representé con entrega y dignidad. Estamos a mano y en paz.”, dijo.

Sin embargo, la dirigencia nacional del PRD no acudió a este evento pese a que el pasado viernes durante su reunión “Cumbre” acordó asistir.

Ni Jesús Zambrano ni Alejandro Sánchez Camacho, presidente y secretario general del PRD asistieron al acto, aunque todas las veces anteriores estuvieron “hombro con hombro” con el tabasqueño. De Cuauhtémoc Cárdenas, ni sus luces.

Tampoco asistieron los gobernadores del PRD en funciones como el de Guerrero, Ángel Heladio Aguirre, ni el jefe del Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard. Lo mismo los electos de Morelos, Graco Ramírez y el del GDF, Miguel Ángel Mancera. Solo acudió el gobernador electo de Tabasco, Arturo Núñez.

Los que sí llegaron fueron los dirigentes nacionales del PT, Alberto Anaya y de Movimiento Ciudadano, Luis Walton, sus otrora aliados del Frente Progresista.

¿QUÉ SIGUE? El tabasqueño llamó a sus huestes a no desanimarse por el resultado de la elección del 1 de julio y aseguró que no claudicará en su intención de lograr el renacimiento de México, por lo cual anunció que habrá acciones de “desobediencia civil”, pero sin afectar terceros, sin violencia y sin caer en provocaciones.

Dijo que su movimiento se mantendrá pacífico, pues ningún líder social tiene derecho a poner en riesgo la vida de los demás, pero se opondrá a las reformas que plantean el PRI y el PAN en detrimento de los mexicanos.

Alejandro Páez, La Crónica, 10 de septiembre.