El método para elegir a sus candidatos confrontó otra vez a las dos principales corrientes del PRD.
Nueva Izquierda, grupo al que pertenece Jesús Ortega, dirigente del partido, busca que en por lo menos la mitad de los 300 distritos electorales del País haya designación de candidatos.
En contraste, Izquierda Unida, corriente afín a Andrés Manuel López Obrador, quiere que en la mayoría de las circunscripciones se realicen procesos internos, y puedan defender su nominación los militantes que han trabajado.
Sin embargo, Hortensia Aragón, secretaria general del PRD, consideró que no hay condiciones para llevar a cabo un proceso de selección interna de candidatos, luego del desgaste que sufrió el partido en la contienda para renovar la dirigencia nacional.
Por ello, dijo, el CEN y la Comisión Política Nacional trabajan para que se reserven y haya designaciones en 200 de los 300 distritos del País.
"Si no completamos los 200 distritos reservados, nos metemos en un lío, porque no habría condiciones para hacer una elección abierta en más de un tercio del País", señaló.
Aragón dijo que ya se han consultado a los dirigentes del partido en 17 entidades -y en el transcurso de ayer y hoy se consultan a los otros 15-, y todos coinciden en que es mejor un acuerdo que una elección interna.
"Pasamos por el momento donde todos se nos ponen nerviosos, por la falta de confianza en los órganos internos y esto puede afectar la definición de reservas.
"Sepan que no habrá actitudes de aplastar, queremos que tenga representatividad todo mundo. Es muy importante tener los mejores perfiles afuera y no sólo a los que logren movilizar mucha gente en la interna, por eso se busca reservar", dijo.
Para Jesús Zambrano, miembro de la Comisión Política Nacional del PRD y del grupo de Nueva Izquierda, es mejor impulsar en el Consejo Nacional las propuestas consensuadas.
"No estamos pensando en cómo sacar el máximo dividendo político, estamos convencidos de la conveniencia del acuerdo, del consenso; aunque quisiéramos no podríamos despacharnos con la cuchara grande.
"Los que quieren que todo se vaya a elección es por que quieren que el conflicto se dé para salir mal y abonarle a la dirigencia nacional un resultado magro; queremos ser corresponsables y que todo mundo se sienta representado", comentó.
Sin embargo, de acuerdo con Dolores Padierna, la desconfianza de Izquierda Unida viene por la correlación de fuerzas que existen en el Consejo Nacional y en la Comisión Electoral, quienes definirán a los candidatos de los distritos reservados, a partir de la negociación en los estados. regresar a titulares
Hugo Corzo, Reforma, 16 de enero.
Nueva Izquierda, grupo al que pertenece Jesús Ortega, dirigente del partido, busca que en por lo menos la mitad de los 300 distritos electorales del País haya designación de candidatos.
En contraste, Izquierda Unida, corriente afín a Andrés Manuel López Obrador, quiere que en la mayoría de las circunscripciones se realicen procesos internos, y puedan defender su nominación los militantes que han trabajado.
Sin embargo, Hortensia Aragón, secretaria general del PRD, consideró que no hay condiciones para llevar a cabo un proceso de selección interna de candidatos, luego del desgaste que sufrió el partido en la contienda para renovar la dirigencia nacional.
Por ello, dijo, el CEN y la Comisión Política Nacional trabajan para que se reserven y haya designaciones en 200 de los 300 distritos del País.
"Si no completamos los 200 distritos reservados, nos metemos en un lío, porque no habría condiciones para hacer una elección abierta en más de un tercio del País", señaló.
Aragón dijo que ya se han consultado a los dirigentes del partido en 17 entidades -y en el transcurso de ayer y hoy se consultan a los otros 15-, y todos coinciden en que es mejor un acuerdo que una elección interna.
"Pasamos por el momento donde todos se nos ponen nerviosos, por la falta de confianza en los órganos internos y esto puede afectar la definición de reservas.
"Sepan que no habrá actitudes de aplastar, queremos que tenga representatividad todo mundo. Es muy importante tener los mejores perfiles afuera y no sólo a los que logren movilizar mucha gente en la interna, por eso se busca reservar", dijo.
Para Jesús Zambrano, miembro de la Comisión Política Nacional del PRD y del grupo de Nueva Izquierda, es mejor impulsar en el Consejo Nacional las propuestas consensuadas.
"No estamos pensando en cómo sacar el máximo dividendo político, estamos convencidos de la conveniencia del acuerdo, del consenso; aunque quisiéramos no podríamos despacharnos con la cuchara grande.
"Los que quieren que todo se vaya a elección es por que quieren que el conflicto se dé para salir mal y abonarle a la dirigencia nacional un resultado magro; queremos ser corresponsables y que todo mundo se sienta representado", comentó.
Sin embargo, de acuerdo con Dolores Padierna, la desconfianza de Izquierda Unida viene por la correlación de fuerzas que existen en el Consejo Nacional y en la Comisión Electoral, quienes definirán a los candidatos de los distritos reservados, a partir de la negociación en los estados. regresar a titulares
Hugo Corzo, Reforma, 16 de enero.
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