El sector privado respaldó ayer el programa anticrisis anunciado por el Presidente Felipe Calderón, pero consideró que debe contemplar medidas adicionales a las señaladas.
El plan, denominado Acuerdo Nacional a Favor de la Economía Familiar y el Empleo, prevé la congelación de los precios de las gasolinas por este año, una reducción de 7 a 20 por ciento en los costos de la electricidad industrial y comercial y una baja de 10 por ciento en el precio del gas LP.
El programa también incluye la ampliación de la cobertura del IMSS a los que se queden sin trabajo y la posibilidad de echar mano de los recursos de las Afores en caso de desempleo, así como la decisión del Gobierno federal de realizar cuando menos 20 por ciento de sus compras a las pequeñas y medianas empresas mexicanas.
Se establecerá un fideicomiso de 5 mil millones de pesos para iniciar el Programa para el Desarrollo de PyMES proveedoras de la industria petrolera nacional. Nacional Financiera y Bancomext incrementarán el financiamiento directo e inducido para las empresas en 21 por ciento, alcanzando un saldo de 176 mil millones de pesos.
De igual forma, el crédito para el sector rural a través de Financiera Rural y el FIRA aumentará 10 por ciento.
Al respecto, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Armando Paredes, al participar como orador en la firma del acuerdo, demandó que, como parte de este paquete, se deje sin efecto el incremento del Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) de 16.5 a 17 por ciento que tuvo efecto este 1 de enero.
"Consideramos que el IETU fue diseñado para una economía en crecimiento. En un escenario recesivo, nos parece recomendable crear un grupo de trabajo que valore los efectos de la actual coyuntura y, de ser necesario, implemente ajustes temporales para evitar secuelas nocivas", expresó.
Carlos Slim coincidió en hacer una evaluación del IETU.
"Es un asunto que hay que discutir ampliamente. Quizá haya que afinarle algunas cosas porque, por ejemplo, algunos productos nacionales están gravados y algunos importados no tienen ese gravamen", manifestó.
Claudio X. González, presidente del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, reconoció que el programa es positivo, pero dijo que los dos planes anticrisis presentados el año pasado no han tenido suficientes resultados debido a que las circunstancias globales han cambiado.
Leonardo Gómez, director general de la Asociación Nacional de Transporte Privado, demandó que se incluya el diesel dentro de los combustibles cuyos precios serán congelados, ya que no está considerado.
"De no congelarse también el precio del diesel (uno de los principales insumos del autotransporte), nuestras empresas enfrentarán problemas graves en los flujos de efectivo y se pondrán en riesgo los empleos", advirtió el empresario.
Con información de Dayna Meré, Reforma, 8 de enero.
El plan, denominado Acuerdo Nacional a Favor de la Economía Familiar y el Empleo, prevé la congelación de los precios de las gasolinas por este año, una reducción de 7 a 20 por ciento en los costos de la electricidad industrial y comercial y una baja de 10 por ciento en el precio del gas LP.
El programa también incluye la ampliación de la cobertura del IMSS a los que se queden sin trabajo y la posibilidad de echar mano de los recursos de las Afores en caso de desempleo, así como la decisión del Gobierno federal de realizar cuando menos 20 por ciento de sus compras a las pequeñas y medianas empresas mexicanas.
Se establecerá un fideicomiso de 5 mil millones de pesos para iniciar el Programa para el Desarrollo de PyMES proveedoras de la industria petrolera nacional. Nacional Financiera y Bancomext incrementarán el financiamiento directo e inducido para las empresas en 21 por ciento, alcanzando un saldo de 176 mil millones de pesos.
De igual forma, el crédito para el sector rural a través de Financiera Rural y el FIRA aumentará 10 por ciento.
Al respecto, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Armando Paredes, al participar como orador en la firma del acuerdo, demandó que, como parte de este paquete, se deje sin efecto el incremento del Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) de 16.5 a 17 por ciento que tuvo efecto este 1 de enero.
"Consideramos que el IETU fue diseñado para una economía en crecimiento. En un escenario recesivo, nos parece recomendable crear un grupo de trabajo que valore los efectos de la actual coyuntura y, de ser necesario, implemente ajustes temporales para evitar secuelas nocivas", expresó.
Carlos Slim coincidió en hacer una evaluación del IETU.
"Es un asunto que hay que discutir ampliamente. Quizá haya que afinarle algunas cosas porque, por ejemplo, algunos productos nacionales están gravados y algunos importados no tienen ese gravamen", manifestó.
Claudio X. González, presidente del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, reconoció que el programa es positivo, pero dijo que los dos planes anticrisis presentados el año pasado no han tenido suficientes resultados debido a que las circunstancias globales han cambiado.
Leonardo Gómez, director general de la Asociación Nacional de Transporte Privado, demandó que se incluya el diesel dentro de los combustibles cuyos precios serán congelados, ya que no está considerado.
"De no congelarse también el precio del diesel (uno de los principales insumos del autotransporte), nuestras empresas enfrentarán problemas graves en los flujos de efectivo y se pondrán en riesgo los empleos", advirtió el empresario.
Con información de Dayna Meré, Reforma, 8 de enero.
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