Busca AMLO nuevo partido

Tras militar 23 años en el PRD, Andrés Manuel López Obrador formalizó ayer su separación de la izquierda y confirmó la intención de convertir a su Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en un nuevo instituto político.

Bajo una enorme manta con la leyenda "Lo nuestro es una cuestión de dignidad" y ante miles de personas reunidas en el Zócalo capitalino, el ex candidato presidencial explicó que no se trata de una ruptura con el PRD, el PT y el Movimiento Ciudadano.

"No se trata de una ruptura. Me despido en los mejores términos. Me separo de los partidos progresistas con mi más profundo agradecimiento a sus dirigentes y militantes", apuntó.

Sin embargo, dijo que es momento de reiniciar la lucha por la transformación del País de manera independiente.

Atrás de él, en el presidium, lo escuchaban los líderes del PT, Alberto Anaya, y del Movimiento Ciudadano, Luis Walton, y aunque fue un compromiso de la dirigencia del PRD acompañar a López Obrador, ni el líder nacional, Jesús Zambrano, ni ningún representante de la cúpula perredista asistieron.

En el templete sólo había legisladores petistas, convergentes, ex perredistas, así como diputados y senadores perredistas identificados con el tabasqueño.

"Tengo en el PRD muchos amigos que, en todo momento, me dieron su confianza y respaldo y, en correspondencia, considero que les di lo mejor de mí y los representé con entrega y dignidad. Estamos a mano y en paz", enfatizó.

Consideró que su decisión ayudará a renovar el movimiento progresista, con el cual está dispuesto a caminar cuando se trate de iniciativas comunes.

Insistió que la contienda que culminó el pasado 1 de julio fue parte de un proceso torcido, en el que predominó el dinero sucio, la compra del voto y la parcialidad de los medios de comunicación y autoridades electorales.

Por ello, dijo, no haría bien en darle la vuelta a la página, como si nada hubiera pasado, y, en consecuencia, no reconocerá la legitimidad de Enrique Peña Nieto.

 
ACCIONES PACÍFICAS
 
Enfatizó que sus acciones serán pacíficas y jamás incitando a la violencia.

En un ambiente poco efusivo, López Obrador desglosó su nuevo proyecto, que arrancará con la elección de órganos de dirección en los estados, así como de una dirigencia nacional de Morena, para después efectuar congresos distritales y estatales y concluir, en noviembre, con una asamblea nacional en la que se defina si pedirán su registro ante el IFE como un partido político.

"Entre todos decidiremos, de manera democrática, si Morena continúa como asociación civil o se constituye en partido político. Morena seguirá siendo un movimiento amplio, plural e incluyente. Ánimo, es poco lo que falta. Uno, dos, tres, seis años, una década, son como un suspiro", alentó.

Expuso que como luchador social sabe que los procesos de transformación son tardados, y la clave está en no perder la fe.

"Cuando nos falte idealismo, pensemos en ese extraordinario luchador social, Ricardo Flores Magón: Cuando muera, mis amigos quizá escriban en mi tumba: 'Aquí yace un soñador', y mis enemigos: 'Aquí yace un loco'. Pero no habrá nadie que se atreva a estampar esta inscripción: 'Aquí yace un cobarde y un traidor a sus ideas'", remató y lanzó el grito de "¡Qué reviva México!".

 
 
 
Los pasos de López
 
La conversión del Movimiento Regeneración Nacional en partido político seguirá el siguiente calendario:
 
· Del 12 de septiembre al 11 de noviembre realizarán congresos distritales y estatales
· El 19 y 20 de noviembre convocarán a congreso nacional
· Prevén la participación de 125 mil delegados
· En los congresos discutirán si Morena se mantiene como asociación civil o partido político
· Elaborarán en asambleas declaración de principios, estatutos y plan de acción
 
OTRAS ACCIONES
 
· No reconocer Peña Nieto como Presidente de México
· Promover un juicio alternativo sobre la elección del 1 de julio, por medio de un tribunal popular electoral
· Resistencia civil del 10 de septiembre al 20 de noviembre
· Movilizaciones el 1 de diciembre
· Impulsar una reforma que elimine monopolios en telecomunicaciones
· Rechazar la reforma laboral presentada por Felipe Calderón

Érika Hernández, Reforma, 10 de septiembre.