Año negro para el PRD; este año perdió casi 800 mil votos en relación con el 2006

El 2008 será un año para olvidar por parte del PRD, que se vio envuelto en la más cruenta crisis interna de su historia, divisiones y pugnas que lo llevaron a sufrir uno de sus peores años en materia electoral, pues perdió alrededor de 800 mil votos con respecto al 2006 en los 6 estados donde se realizaron comicios durante este año.

Hidalgo fue el caso más dramático, pues en tan sólo dos años, el PRD perdió casi 260 mil votos con respecto a 2006, donde obtuvo 385 mil 750 sufragios con Andrés Manuel López Obrador, contra los 126 mil 801 votos que registró en los comicios de este año en esa entidad.

Es decir, del 40.79% que registraron en el 2006 con AMLO, ahora sólo obtuvieron el 19.8%, una caída de más del 20% en la votación.

Coahuila fue otro caso sintomático donde el PRD perdió en tan sólo dos años 200 mil votos, con respecto al 2006, donde obtuvo 225 mil 117 votos con López Obrador contra los 25 mil 577 sufragios que registró en octubre pasado.

Es decir, del 24.2% descendió al 3.6%, según un reporte electoral del PRD.

En Guerrero, que es uno de los bastiones perredistas más importantes, el sol azteca también disminuyó de manera importante su votación comparada con la presidencial del 2006, cuando con López Obrador ese partido obtuvo 510 mil 207 votos en esa entidad.

Pero el 5 de octubre de este año, el PRD sólo obtuvo 371 mil 482 votos, es decir, 140 mil votos menos, lo que significó un decremento del 51.43% que obtuvo con AMLO en el 2006 a 32.7% en los pasados comicios de octubre, donde además luego de una pugna con sus aliados del Frente Amplio Progresista (PT y Convergencia) entregaron Acapulco, considerada la joya de la corona en esa elección.

La obtención de la alcaldía de Cancún, en las elecciones de Quintana Roo que se realizaron en febrero, significó oxígeno puro para el PRD, pero aún con ese triunfo, el sol azteca perdió más de 70 mil votos en esos comicios con respecto al 2006, pues con AMLO lograron 147 mil 839 votos contra 73 mil 005 votos que registraron en esta ocasión y eso gracias a los 55 mil 880 sufragios que obtuvo Gregorio Sánchez para ganar Cancún.

En Baja California Sur y Nayarit el PRD también sufrió retroceso respecto al 2006.

De hecho en esta última entidad, el PRD perdió alrededor de 65 mil votos comparado con el 2006, cuando con AMLO registraron 152 mil 999 votos contra los 87 mil 125 que obtuvo durante los comicios de este año.

NO PINTA EL AMARILLO. Si el 2008 fue difícil para el PRD, el 2009 donde se renovará la Cámara de Diputados y seis gubernaturas no pinta nada halagüeño para el PRD, pues en 17 estados del país, el sol azteca sencillamente "no pinta".

Baja California, Coahuila, Chihuahua, Tamaulipas, Durango, Colima, San Luis Potosí, Nuevo León, Sonora, Sinaloa, Querétaro, Jalisco, Aguascalientes, Guanajuato, Puebla, Yucatán y Campeche, son los estados donde el sol azteca tendrá una participación casi testimonial, según un documento denominado Balance Electoral 2006-2008.

"Nuestro partido competirá en 15 estados de manera importante, de los cuales sólo en dos (DF y Baja California Sur) tiene un dominio electoral importante. En los restantes 17 estados nuestro partido tendrá un papel casi testimonial, a menos que se ejecuten en estos estados exitosos procesos de selección de candidatos, que cuenten con buena aceptación ciudadana", reconoce el reporte interno.

El mismo documento de la secretaria de elecciones reconoce que el conflicto interno provocado tras la elección del 16 de marzo y las acciones de resistencia civil que encabeza López Obrador, han deteriorado la imagen del partido ante los electores.

"Las tendencias de la votación de 2006 no se mantendrán para el próximo proceso electoral. Las últimas encuestas ubican al PRD con 13 por ciento de la preferencia ciudadana, y con una tendencia PRI-PAN que se ve difícil revertir.

Señalan como causas del desplome electoral el plantón en Paseo de la Reforma después de los comicios presidenciales de 2006, la imagen de "partido rijoso" que generó la toma de tribunas en el Congreso.

El documento apunta como otra causa del desplome la crisis interna provocada por la elección del 16 de marzo para renovar la dirigencia nacional.

"No podemos cerrar los ojos a las circunstancias actuales de la preferencia electoral nacional; el conflicto postelectoral con la toma de Reforma y el Zócalo, la intensa campaña negativa que los medios de comunicación emprendieron contra el PRD en tres momentos: el primero, a partir del conflicto postelectoral y sus acciones emprendidas desde agosto del 2006; en segundo lugar, el linchamiento mediático por la toma de tribunas y su impacto negativo en la opinión pública y por el grave conflicto interno del 16 de marzo.

"El panorama del PRD no pinta de la mejor manera, la elección interna del 16 de marzo quebrantó el equilibrio interno el partido. Dos proyectos de partido, izquierda y país enfrentados por la dirección del PRD, agudizado por la incorrecta intervención de Andrés Manuel López Obrador a favor de un candidato", sentencia el documento.

En los estados de Morelos, Hidalgo, Oaxaca, Veracruz, Quintana Roo, Tlaxcala y Nayarit, el PRD es segunda fuerza electoral, tiene presencia media y cuenta con posibilidades de competencia.

En tanto, en el Distrito Federal, Estado de México, Chiapas, Guerrero, Zacatecas, Baja California Sur, Tabasco y Michoacán, cuenta con "alta competitividad electoral". Aquí se ubican las seis entidades que gobierna en el país.

De acuerdo con el documento, la apuesta será abrir las candidaturas en su totalidad a externos en los distritos federales que abarquen las 17 entidades donde su competitividad es mínima. En los estados intermedios, 60 por ciento de los espacios se entregarán a candidatos externos, en tanto que en los ocho restantes se apostará por candidatos propios en 60 por ciento de los casos.
Alejandro Páez, Crónica, 29 de diciembre.

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