De empeorar la crisis financiera, el retorno de connacionales a México será una decisión extrema, pues optarán por buscar otro empleo en Estados Unidos, aunque sea mal pagado, indicaron especialistas.
En el informe "La crisis financiera en Estados Unidos y su impacto en la migración mexicana", investigadores del Colegio de la Frontera Norte afirman que existen factores del por qué los mexicanos no visualizan el regreso a su tierra de origen pese a la crisis económica.
Entre las causas está el grave escenario de desempleo en México y la situación económica no pinta para estar mejor; no tienen el suficiente arraigo en su país de origen porque, incluso, se llevaron a su familia o la mitad de los hijos son estadounidenses; y las medidas de seguridad en la frontera son mejores para regresar meses más tarde.
"Antes de regresar de inmediato por la pérdida de un empleo, los migrantes mexicanos en Estados Unidos buscarán otro trabajo, ya sea en el mismo sector o en otro, ya sea en la misma región u otra. Los costos del regreso son altos.
"El retorno podría ser una decisión extrema que algunos migrantes podrían tomar si la crisis económica llegará a grados extremos", indica el documento.
Los académicos afirman que no habrá un escenario "de pánico" como en la crisis de 1929, donde en un lapso de seis años después retornaron de manera forzada 415 mil migrantes, o como al termino del Programa Bracero, en 1964.
Señalan que el mayor numero de deportaciones se dio en 2003, y aunque las autoridades han visualizado que podría regresar hasta 1.5 millones de migrantes por los efectos de la crisis económica, no existen, apuntan, elementos para suponer que así será.
El estudio indica que quienes decidan regresar a México serán quienes desean pasar un corto tiempo porque tienen arraigo familiar en México, pero cuentan con un empleo seguro y propiedades en EU. regresar a titulares
Erika Hernández, Reforma, 12 de enero.
En el informe "La crisis financiera en Estados Unidos y su impacto en la migración mexicana", investigadores del Colegio de la Frontera Norte afirman que existen factores del por qué los mexicanos no visualizan el regreso a su tierra de origen pese a la crisis económica.
Entre las causas está el grave escenario de desempleo en México y la situación económica no pinta para estar mejor; no tienen el suficiente arraigo en su país de origen porque, incluso, se llevaron a su familia o la mitad de los hijos son estadounidenses; y las medidas de seguridad en la frontera son mejores para regresar meses más tarde.
"Antes de regresar de inmediato por la pérdida de un empleo, los migrantes mexicanos en Estados Unidos buscarán otro trabajo, ya sea en el mismo sector o en otro, ya sea en la misma región u otra. Los costos del regreso son altos.
"El retorno podría ser una decisión extrema que algunos migrantes podrían tomar si la crisis económica llegará a grados extremos", indica el documento.
Los académicos afirman que no habrá un escenario "de pánico" como en la crisis de 1929, donde en un lapso de seis años después retornaron de manera forzada 415 mil migrantes, o como al termino del Programa Bracero, en 1964.
Señalan que el mayor numero de deportaciones se dio en 2003, y aunque las autoridades han visualizado que podría regresar hasta 1.5 millones de migrantes por los efectos de la crisis económica, no existen, apuntan, elementos para suponer que así será.
El estudio indica que quienes decidan regresar a México serán quienes desean pasar un corto tiempo porque tienen arraigo familiar en México, pero cuentan con un empleo seguro y propiedades en EU. regresar a titulares
Erika Hernández, Reforma, 12 de enero.
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