La reunión entre Felipe Calderón y Barack Obama ofrece una oportunidad de sentar el tono de lo que puede ser la relación bilateral, más allá de temas como el de seguridad, migración o la crisis económica, consideró María Isabel Studer Noguez, directora del Centro de Diálogo y Análisis sobre América del Norte del Tecnológico de Monterrey, campus Ciudad de México.
La maestra en Relaciones Internacionales por la Paul H. Nize School of Advanced International Studies de la John Hopkins University de Washington señaló que corresponde a México llevar a la agenda estadunidense temas como los servicios de salud o la estrategia energética y cambio climático, asuntos de vital importancia para la política interna de aquel país.
Con respecto a una reforma migratoria, opinó que una vez más habrá “enchilada incompleta”, puesto que los ojos de EU están puestos en la crisis financiera y no en una reforma migratoria.
“No creo que haya un ánimo muy grande en Washington ahora para continuar con la agenda social. El tema, por ejemplo, de seguridad energética, de cambio climático, de los costos de salud son los que le interesan ahora a Estados Unidos, y en donde México puede subirse para hacer una contribución interesante, pero nosotros tenemos que hacer esa propuesta, no puede venir de EU, a ellos les interesa de por sí”, comentó en entrevista con Crónica.
Consideró que, aunado a los tres temas obvios en la agenda bilateral, como la crisis económica, seguridad y migración, en la reunión de este lunes hay una posibilidad de aprovechar el discurso optimista de Barack Obama.
“Hay oportunidad de hablar de una estrategia energética que además pueda atender las preocupaciones sobre cambio climático, por ejemplo. Creo que México y EU podrían trabajar conjuntamente en este sentido, sobre todo ahora que vemos que la cuestión del sector petrolero no es la más favorable para el país, y EU también está buscando alternativas”, abundó Studer Noguez, quien ha fungido como directora de Investigación de la Comisión de Cooperación Laboral de América del Norte.
De esta manera, aunque México no sea la gran prioridad para EU, sí puede generar una agenda positiva de cooperación en la relación bilateral.
En el caso del cambio climático, una prueba de la trascendencia que tiene este tema para Obama, comentó, es la llegada a su equipo de Carol Browner, quien estuviera al frente de la Agencia de Protección Ambiental en la presidencia de William Clinton.
Ese es un tema que México debe aprovechar y en donde el presidente Calderón ha mostrado gran interés.
Con respecto al tema migratorio, resaltó que, aunque los demócratas han sido ideológicamente más afines a una regularización de los migrantes, no es probable que sea una prioridad en el gobierno de Obama por una sencilla razón: Washington está centrado en resolver la crisis financiera que lo agobia.
“No será tan sencillo que el tema migratorio se presente como una prioridad y, además, el gran problema de la política estadunidense es que dentro de dos años tenemos otra vez elecciones en el Congreso; entonces, Obama tiene cerca de un año de oportunidad para pasar las reformas más importantes que necesita antes de que los congresistas empiecen a pensar en su reelección y difícilmente veo que el tema migratorio pueda colarse como un tema prioritario en la agenda”, opinó.
Subrayó que, además, el gobierno mexicano deber tener un plan de acción que alcance al Congreso de EU. “Sabemos muy bien que todos estos temas van a pasar por el Congreso. De nada sirve que vayamos a decirle al secretario de Comercio, de Salud, a los asesores de Obama que esto es lo que nos interesa. Si no hacemos el trabajo que tenemos que hacer en el Congreso de EU de nada va a servir”, enfatizó.
La maestra en Relaciones Internacionales por la Paul H. Nize School of Advanced International Studies de la John Hopkins University de Washington señaló que corresponde a México llevar a la agenda estadunidense temas como los servicios de salud o la estrategia energética y cambio climático, asuntos de vital importancia para la política interna de aquel país.
Con respecto a una reforma migratoria, opinó que una vez más habrá “enchilada incompleta”, puesto que los ojos de EU están puestos en la crisis financiera y no en una reforma migratoria.
“No creo que haya un ánimo muy grande en Washington ahora para continuar con la agenda social. El tema, por ejemplo, de seguridad energética, de cambio climático, de los costos de salud son los que le interesan ahora a Estados Unidos, y en donde México puede subirse para hacer una contribución interesante, pero nosotros tenemos que hacer esa propuesta, no puede venir de EU, a ellos les interesa de por sí”, comentó en entrevista con Crónica.
Consideró que, aunado a los tres temas obvios en la agenda bilateral, como la crisis económica, seguridad y migración, en la reunión de este lunes hay una posibilidad de aprovechar el discurso optimista de Barack Obama.
“Hay oportunidad de hablar de una estrategia energética que además pueda atender las preocupaciones sobre cambio climático, por ejemplo. Creo que México y EU podrían trabajar conjuntamente en este sentido, sobre todo ahora que vemos que la cuestión del sector petrolero no es la más favorable para el país, y EU también está buscando alternativas”, abundó Studer Noguez, quien ha fungido como directora de Investigación de la Comisión de Cooperación Laboral de América del Norte.
De esta manera, aunque México no sea la gran prioridad para EU, sí puede generar una agenda positiva de cooperación en la relación bilateral.
En el caso del cambio climático, una prueba de la trascendencia que tiene este tema para Obama, comentó, es la llegada a su equipo de Carol Browner, quien estuviera al frente de la Agencia de Protección Ambiental en la presidencia de William Clinton.
Ese es un tema que México debe aprovechar y en donde el presidente Calderón ha mostrado gran interés.
Con respecto al tema migratorio, resaltó que, aunque los demócratas han sido ideológicamente más afines a una regularización de los migrantes, no es probable que sea una prioridad en el gobierno de Obama por una sencilla razón: Washington está centrado en resolver la crisis financiera que lo agobia.
“No será tan sencillo que el tema migratorio se presente como una prioridad y, además, el gran problema de la política estadunidense es que dentro de dos años tenemos otra vez elecciones en el Congreso; entonces, Obama tiene cerca de un año de oportunidad para pasar las reformas más importantes que necesita antes de que los congresistas empiecen a pensar en su reelección y difícilmente veo que el tema migratorio pueda colarse como un tema prioritario en la agenda”, opinó.
Subrayó que, además, el gobierno mexicano deber tener un plan de acción que alcance al Congreso de EU. “Sabemos muy bien que todos estos temas van a pasar por el Congreso. De nada sirve que vayamos a decirle al secretario de Comercio, de Salud, a los asesores de Obama que esto es lo que nos interesa. Si no hacemos el trabajo que tenemos que hacer en el Congreso de EU de nada va a servir”, enfatizó.
Olivier Pavón, Crónica, 10 de enero.
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