La iniciativa de reforma política del Ejecutivo federal tiene omisiones, no promueve el equilibrio de poderes y de aprobarse como se presentó, puede llevar a una regresión autoritaria en el País, advirtieron ayer varios juristas.
Al participar en el foro del Senado, los investigadores del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, Diego Valadés, David Barceló, Miguel Carbonell y Lorenzo Córdova señalaron las deficiencias de una reforma parcial.
Valadés dijo que la propuesta presidencial no persigue los objetivos anunciados públicamente, sino acentuar lo arcaico de las actuales instituciones políticas.
"En México tenemos una sociedad moderna regido por un Estado arcaico. Dos aspectos de esta iniciativa resultan sorprendentes. Se trata de la primera propuesta de gran calado en esta materia desde que comenzó la transición democrática en 1977, que se envía al Congreso sin un acuerdo previo entre las fuerzas políticas.
"Después de tres décadas de experiencia en la construcción de consensos, se retornó al modelo autoritario", reprochó Valadés.
El segundo factor sorprendente, agregó, es lo disfuncional de las propuestas desde la perspectiva de un Estado constitucional.
"El equilibrio de Poderes no se logra limitando a uno de ellos, sino buscando un nuevo equilibrio, y en el caso de la iniciativa presidencial no se plantearon mecanismos de control presidencial sino al contrario", añadió el ex director del IIJ.
En tanto, Carbonell comentó que la reforma del Presidente Calderón también se valora por sus omisiones, pues no contiene ninguna propuesta para limitar el poder presidencial, ni para dar dinamismo al informe presidencial, estableciendo las preguntas parlamentarias, entre otros puntos.
"Hay un hueco enorme en la iniciativa del Presidente, que es todo lo que tiene que ver con control parlamentario, el equilibrio de los poderes, la posibilidad de llamar a cuentas al Poder Ejecutivo", cuestionó.
Lorenzo Córdova dijo que la propuesta presidencial sobre el referéndum, sin mecanismos de supervisión, puede llevarnos a una peligrosa derivación autoritaria.
"El referéndum tal y como ha sido planteado en la iniciativa presidencial, es un mecanismo subsidiario frente al Legislativo y solamente limitado a las iniciativas preferentes en materia constitucional. Nunca debe permitirse el llamado a la consulta, al referéndum en este caso, por el Ejecutivo, sin un visto bueno, sin la ponderación, sin la mediación del Legislativo", señaló.
David Barceló se refirió a los vacíos de la iniciativa del Calderón que pueden ser peligrosos de no atenderse en una segunda serie de propuestas anunciadas también en diciembre por el Presidente Calderón.
"La iniciativa es claramente incompleta porque le hace falta justamente el equilibrio de los poderes. Si se queda así es una iniciativa que sólo refuerza el poder del Presidente, lo cual es muy peligroso", señaló Barceló.
Al participar en el foro del Senado, los investigadores del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, Diego Valadés, David Barceló, Miguel Carbonell y Lorenzo Córdova señalaron las deficiencias de una reforma parcial.
Valadés dijo que la propuesta presidencial no persigue los objetivos anunciados públicamente, sino acentuar lo arcaico de las actuales instituciones políticas.
"En México tenemos una sociedad moderna regido por un Estado arcaico. Dos aspectos de esta iniciativa resultan sorprendentes. Se trata de la primera propuesta de gran calado en esta materia desde que comenzó la transición democrática en 1977, que se envía al Congreso sin un acuerdo previo entre las fuerzas políticas.
"Después de tres décadas de experiencia en la construcción de consensos, se retornó al modelo autoritario", reprochó Valadés.
El segundo factor sorprendente, agregó, es lo disfuncional de las propuestas desde la perspectiva de un Estado constitucional.
"El equilibrio de Poderes no se logra limitando a uno de ellos, sino buscando un nuevo equilibrio, y en el caso de la iniciativa presidencial no se plantearon mecanismos de control presidencial sino al contrario", añadió el ex director del IIJ.
En tanto, Carbonell comentó que la reforma del Presidente Calderón también se valora por sus omisiones, pues no contiene ninguna propuesta para limitar el poder presidencial, ni para dar dinamismo al informe presidencial, estableciendo las preguntas parlamentarias, entre otros puntos.
"Hay un hueco enorme en la iniciativa del Presidente, que es todo lo que tiene que ver con control parlamentario, el equilibrio de los poderes, la posibilidad de llamar a cuentas al Poder Ejecutivo", cuestionó.
Lorenzo Córdova dijo que la propuesta presidencial sobre el referéndum, sin mecanismos de supervisión, puede llevarnos a una peligrosa derivación autoritaria.
"El referéndum tal y como ha sido planteado en la iniciativa presidencial, es un mecanismo subsidiario frente al Legislativo y solamente limitado a las iniciativas preferentes en materia constitucional. Nunca debe permitirse el llamado a la consulta, al referéndum en este caso, por el Ejecutivo, sin un visto bueno, sin la ponderación, sin la mediación del Legislativo", señaló.
David Barceló se refirió a los vacíos de la iniciativa del Calderón que pueden ser peligrosos de no atenderse en una segunda serie de propuestas anunciadas también en diciembre por el Presidente Calderón.
"La iniciativa es claramente incompleta porque le hace falta justamente el equilibrio de los poderes. Si se queda así es una iniciativa que sólo refuerza el poder del Presidente, lo cual es muy peligroso", señaló Barceló.
Guadalupe Irízar, Reforma, 26 de enero.
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