“El gobierno es respetuoso de la dinámica interna de los partidos, pero entiende que son debates que implican una profunda reflexión, porque hay pros y contras, así como posibles ventajas y desventajas. Ese tipo de decisiones requiere de una ingeniería democrática que pase por un acto de reflexión sobre cuál es el propósito que se persigue y la estrategia política que sirva a la sociedad”, dijo.
–La presidenta del PRI, Beatriz Paredes, ha condicionado el diálogo con el gobierno y el PAN a que se eche atrás la alianza con el PRD –se le hizo notar.
–Con todo respeto, para poder denunciar un supuesto intento de polarización esto no es muy conciliador. Como todo discurso político tienen que distinguirse actos concretos que nos permitan definirnos al respecto, a fin de denunciar lo que supuestamente señala (Beatriz Paredes). Ésa es mi respuesta.
Antes de ingresar al patio central de la Casa de la Cultura de Puebla, donde cenaría con los legisladores panistas, Gómez Mont –rodeado de siete integrantes del Estado Mayor Presidencial– respondió afable a las preguntas de los reporteros. Al abordar el debate de priístas y panistas en torno a la reforma política del Ejecutivo federal, expuso la postura de la administración calderonista.
‘‘Anteponer posturas sería simple y sencillamente dislocar cualquier articulación realista de un debate serio. Hasta donde yo entiendo, ha habido voces distintas con matices diversos en relación con los partidos políticos, y ahí vamos monitoreando a fin de entender las mejores posibilidades y los mejores escenarios. Y en función de las posturas que se presentan, nosotros tendremos una respuesta. Yo siempre he dicho que la iniciativa de reforma política del Presidente no es excluyente ni debe ser excluida. Es la fijación de una postura del jefe de Estado y de jefe de gobierno frente a un tema que preocupa mucho a la ciudadanía”.
Gómez Mont adelantó que la iniciativa gubernamental puede tener como consecuencia una nueva reforma electoral de contenidos y alcances distintos a la existente.
Acompañado por Josefina Vázquez Mota, coordinadora del grupo parlamentario panista en la Cámara de Diputados, el secretario de Gobernación insistió en que la propuesta del Ejecutivo federal no es autoritaria y en ningún momento supedita al Poder Legislativo. “Lo que señala es que si el Legislativo, por ejemplo en el caso de la iniciativa preferente, no responde a la solicitud del Presidente por aprobarla, éste podría, facultado por la ley, promulgarla.
“Si en ese sentido el Poder Legislativo no se pronuncia y no alcanza mayorías para rechazarla o para aprobarla, se le da oportunidad al Ejecutivo para que esa política pública se pueda implementar a cambio de la responsabilidad política y constitucional del Ejecutivo; no se trata de un escenario donde da preponderancia al propio Ejecutivo frente a una definición del Legislativo. Se trata de establecer los incentivos para que en los temas centrales el Legislativo se pronuncie y actúe en función de una propuesta que envíe el Presidente de la República.”
Sinaloa, dominado por una “camarilla mafiosa”: Clouthier
Por su parte, el diputado Manuel Clouthier –hijo de Maquío– insistió en su acusación al gobierno de Sinaloa de operar como una “camarilla mafiosa” que ha postrado a la sociedad en un proceso de degradación.
“Hay una camarilla mafiosa en el poder, lo que obliga a que la Federación provea de una atención especial al estado”, advirtió el hijo del extinto candidato presidencial panista.
–¿En esa mafia se encuentra el gobernador?
–Es una camarilla, no una persona, es un pequeño grupo que trabaja eficientemente (pero) para hacer el mal.
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