CULIACÁN, Sin.— Periodistas de la zona norte del estado exigieron que no haya simulación en la búsqueda del reportero radiofónico José Luis Romero, levantado junto con el ex militar Eliud Lorenzo Patiño el 30 de diciembre pasado por un grupo armado en Los Mochis, Sinaloa.
El secuestro de Romero motivó la intervención de organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales que condenaron el ambiente de inseguridad e impunidad en el que se desenvuelve el ejercicio periodístico en México.
“Cada vez son más los informadores víctimas de amenazas, intimidaciones, persecuciones, atentados y desapariciones forzadas”, indicó el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Raúl Plascencia Villanueva, al condenar la violencia contra periodistas.
Reporteros sin Fronteras emitió un comunicado en el que alertó sobre la situación de los periodistas en México y consideró que “es más que dramática” tras el asesinato del agente especial encargado de investigar la desaparición de Romero.
La organización, con sede en París, Francia, se refirió al asesinato del jefe de investigaciones de la Policía Ministerial de Sinaloa, Jesús Escalante Leyva, horas después de iniciar la investigación sobre el secuestro del reportero de radio.
“La violencia llega incluso al punto de paralizar el trabajo de las autoridades encargadas de garantizar seguridad y justicia, como pone de manifiesto el asesinato del policía encargado de la investigación”.
El lunes, ante el director de Averiguaciones Previas de la Procuraduría de Justicia estatal, Alfonso Acuña Delgado, reporteros de diferentes medios Los Mochis cuestionaron la falta de interés para dar con el paradero de Romero, de 40 años.
Según informes, hasta ahora ninguna autoridad ha emitido órdenes de búsqueda del periodista policiaco y que trabaja para el noticiario radiofónico Línea Directa.
El subprocurador de Justicia del estado, Rodrigo Castro, rechazó la versión y explicó que todos los datos que se recaban son compartidos con la Fiscalía Especializada en Delitos contra Periodistas de la PGR.
El secuestro de Romero motivó la intervención de organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales que condenaron el ambiente de inseguridad e impunidad en el que se desenvuelve el ejercicio periodístico en México.
“Cada vez son más los informadores víctimas de amenazas, intimidaciones, persecuciones, atentados y desapariciones forzadas”, indicó el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Raúl Plascencia Villanueva, al condenar la violencia contra periodistas.
Reporteros sin Fronteras emitió un comunicado en el que alertó sobre la situación de los periodistas en México y consideró que “es más que dramática” tras el asesinato del agente especial encargado de investigar la desaparición de Romero.
La organización, con sede en París, Francia, se refirió al asesinato del jefe de investigaciones de la Policía Ministerial de Sinaloa, Jesús Escalante Leyva, horas después de iniciar la investigación sobre el secuestro del reportero de radio.
“La violencia llega incluso al punto de paralizar el trabajo de las autoridades encargadas de garantizar seguridad y justicia, como pone de manifiesto el asesinato del policía encargado de la investigación”.
El lunes, ante el director de Averiguaciones Previas de la Procuraduría de Justicia estatal, Alfonso Acuña Delgado, reporteros de diferentes medios Los Mochis cuestionaron la falta de interés para dar con el paradero de Romero, de 40 años.
Según informes, hasta ahora ninguna autoridad ha emitido órdenes de búsqueda del periodista policiaco y que trabaja para el noticiario radiofónico Línea Directa.
El subprocurador de Justicia del estado, Rodrigo Castro, rechazó la versión y explicó que todos los datos que se recaban son compartidos con la Fiscalía Especializada en Delitos contra Periodistas de la PGR.
Javier Cabrera corresponsal, El Universal, 5 de enero.
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