El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, dijo que la alianza electoral entre PAN y PRD no es ninguna promiscuidad, como ha sido calificada por algunos priistas.
“Es como cuando hemos visto el Impuesto al Valor Agregado, o el Presupuesto de Egresos, o el aumento a las gasolinas, ahí la promiscuidad estuvo en otro lado. Cuando se da una decisión por parte del PRD en algunas entidades federativas de hacer una alianza con otros partidos, no veo por qué deba ser calificada de esa forma, yo creo que es perfectamente válido y legítimo”, dijo.
El mandatario capitalino añadió que la alianza PRD-PAN “es algo válido y legítimo considerando que los partidos pueden organizar coaliciones cuando coinciden con un candidato con un programa común”.
Durante su participación en el Seminario sobre Reforma Política, realizado en el Senado de la República, Ebrard reclamó el mal trato que ha recibido el Distrito Federal, ya que “se le han escatimado las posibilidades de tener un estatus político y jurídico similar en sus derechos, en su soberanía, a la de los estados de la república, y el gran argumento para ello ha sido la protección del Ejecutivo federal”.
Enfatizó que la capital del país debe contar con una Constitución propia; que la ALDF pueda legislar en todos los temas del DF, que el techo de deuda lo fije la Asamblea, y que no haya posibilidad de destitución del jefe de gobierno por parte del Senado de la República.
“En pocas palabras, que tenga la misma naturaleza jurídica y derechos que tienen los estados. La ruta la estamos trabajando con la ALDF, pero se lo quise plantear a los senadores para que hagamos una sola ruta de trabajo”, dijo.
Consideró que el modelo institucional de relación entre el Ejecutivo y las autoridades electas del DF está mal hecho, “es decir, no está funcionando, su pretensión originaria era mantener una esfera de equilibrio entre el ser sede de los poderes federales y el tener autoridades propias electas”.
“Si revisamos la experiencia de la última década, lo que ha ocurrido es una circunstancia estructural, sistémica de conflictos, ausencias o zonas nebulosas, zonas poco claras, en la relación entre las dos instancias de gobierno”, indicó.
Respecto a las propuestas enviadas por el Ejecutivo federal sobre reforma política, Ebrard señaló que sería un error la reducción del número de legisladores de representación proporcional, ya que es una opción estratégica, y dijo estar en contra de aumentar el porcentaje para que los partidos políticos conserven su registro.
En el caso de la reelección, consideró que “es una mala idea como está planteada”, y expresó que “si no se desea la reelección del titular del Ejecutivo federal, porque se considera inconveniente, polémica o indeseable, por qué sí se plantea para legisladores federales y presidentes municipales. Es decir, yo encuentro ahí un problema serio”.
“Es como cuando hemos visto el Impuesto al Valor Agregado, o el Presupuesto de Egresos, o el aumento a las gasolinas, ahí la promiscuidad estuvo en otro lado. Cuando se da una decisión por parte del PRD en algunas entidades federativas de hacer una alianza con otros partidos, no veo por qué deba ser calificada de esa forma, yo creo que es perfectamente válido y legítimo”, dijo.
El mandatario capitalino añadió que la alianza PRD-PAN “es algo válido y legítimo considerando que los partidos pueden organizar coaliciones cuando coinciden con un candidato con un programa común”.
Durante su participación en el Seminario sobre Reforma Política, realizado en el Senado de la República, Ebrard reclamó el mal trato que ha recibido el Distrito Federal, ya que “se le han escatimado las posibilidades de tener un estatus político y jurídico similar en sus derechos, en su soberanía, a la de los estados de la república, y el gran argumento para ello ha sido la protección del Ejecutivo federal”.
Enfatizó que la capital del país debe contar con una Constitución propia; que la ALDF pueda legislar en todos los temas del DF, que el techo de deuda lo fije la Asamblea, y que no haya posibilidad de destitución del jefe de gobierno por parte del Senado de la República.
“En pocas palabras, que tenga la misma naturaleza jurídica y derechos que tienen los estados. La ruta la estamos trabajando con la ALDF, pero se lo quise plantear a los senadores para que hagamos una sola ruta de trabajo”, dijo.
Consideró que el modelo institucional de relación entre el Ejecutivo y las autoridades electas del DF está mal hecho, “es decir, no está funcionando, su pretensión originaria era mantener una esfera de equilibrio entre el ser sede de los poderes federales y el tener autoridades propias electas”.
“Si revisamos la experiencia de la última década, lo que ha ocurrido es una circunstancia estructural, sistémica de conflictos, ausencias o zonas nebulosas, zonas poco claras, en la relación entre las dos instancias de gobierno”, indicó.
Respecto a las propuestas enviadas por el Ejecutivo federal sobre reforma política, Ebrard señaló que sería un error la reducción del número de legisladores de representación proporcional, ya que es una opción estratégica, y dijo estar en contra de aumentar el porcentaje para que los partidos políticos conserven su registro.
En el caso de la reelección, consideró que “es una mala idea como está planteada”, y expresó que “si no se desea la reelección del titular del Ejecutivo federal, porque se considera inconveniente, polémica o indeseable, por qué sí se plantea para legisladores federales y presidentes municipales. Es decir, yo encuentro ahí un problema serio”.
Blanca Estela Botello, Crónica, 27 de enero.
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