Sin acuerdo entres los seis aspirantes a la Gubernatura de Oaxaca, las negociaciones del PRI están entrampadas y con dificultades para construir una candidatura de unidad, como ha ocurrido en Chihuahua y Tamaulipas.
Algunos de los precandidatos demandaron que la selección del abanderado sea transparente y equitativa.
"Hay que parar las cargadas innecesarias. Estamos a cuatro semanas de que se lleve a cabo la selección del candidato y pedimos a las dirigencias local y nacional, y a los liderazgos formales y morales del PRI que asuman la conducción del proceso interno, pero sin dados cargados", exigió el senador Adolfo Toledo.
Por su parte, José Antonio Estefan Garfias, reconoció que el Gobernador Ulises Ruiz puede tener simpatías hacia alguno de los aspirantes, pero confió en que la decisión final sea tomada por la militancia del tricolor.
"Tiene que ser una asamblea de delegados. La militancia debe tener un papel en esta designación y lo importante es que los procesos internos se valoren con una óptica de justicia y equidad, que permitan que se lleve a cabo un proceso muy transparente", demandó.
Cuestionado al respecto, el delegado del CEN priista en Oaxaca, Carlos Jiménez Macías, afirmó que nadie está descartado en el proceso interno.
El senador descartó que la elección del candidato genere divisiones internas, pero reconoció que hay coqueteos de la oposición con alguno de los aspirantes.
Además de Toledo y Estefan Garfias, se menciona al Alcalde de Oaxaca, José Antonio Hernández; el dirigente estatal del PRI, Jorge Franco; el secretario de Salud estatal, Martín Vázquez, y el líder de los diputados federales de Oaxaca, Eviel Pérez, considerado como candidato del Ulises Ruiz.
Algunos de los precandidatos demandaron que la selección del abanderado sea transparente y equitativa.
"Hay que parar las cargadas innecesarias. Estamos a cuatro semanas de que se lleve a cabo la selección del candidato y pedimos a las dirigencias local y nacional, y a los liderazgos formales y morales del PRI que asuman la conducción del proceso interno, pero sin dados cargados", exigió el senador Adolfo Toledo.
Por su parte, José Antonio Estefan Garfias, reconoció que el Gobernador Ulises Ruiz puede tener simpatías hacia alguno de los aspirantes, pero confió en que la decisión final sea tomada por la militancia del tricolor.
"Tiene que ser una asamblea de delegados. La militancia debe tener un papel en esta designación y lo importante es que los procesos internos se valoren con una óptica de justicia y equidad, que permitan que se lleve a cabo un proceso muy transparente", demandó.
Cuestionado al respecto, el delegado del CEN priista en Oaxaca, Carlos Jiménez Macías, afirmó que nadie está descartado en el proceso interno.
El senador descartó que la elección del candidato genere divisiones internas, pero reconoció que hay coqueteos de la oposición con alguno de los aspirantes.
Además de Toledo y Estefan Garfias, se menciona al Alcalde de Oaxaca, José Antonio Hernández; el dirigente estatal del PRI, Jorge Franco; el secretario de Salud estatal, Martín Vázquez, y el líder de los diputados federales de Oaxaca, Eviel Pérez, considerado como candidato del Ulises Ruiz.
Claudia Guerrero, Reforma, 28 de enero.
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