Soldados son víctimas no victimarios, aclara

Los soldados y marinos no son victimarios, sino al igual que los ciudadanos inocentes, víctimas de los criminales, por lo cual lo mínimo que pueden pedir quienes arriesgan a diario su vida son condiciones de certeza “para que no haya imputaciones alevosas, tramposas, como las muchas que se han fincado injustamente contra las fuerzas armadas”, aseguró el presidente Felipe Calderón.

Al pedir una vez más la aprobación de la Ley de Seguridad Nacional, reunido con la bancada de los diputados del PAN, el mandatario sostuvo que se requiere de la responsabilidad de los estados y municipios “porque no se vale que por la mañana vayan y pidan que mande más Ejército y más Marina y que por la tarde salgan a criticar el problema de violencia que genera el gobierno federal, no es así”.

Afirmó: “También los soldados, los marinos que han perdido la vida, los que están desaparecidos, sus viudas, sus huérfanos, no señores, ellos no son victimarios de nadie, son víctimas de la criminalidad como son los ciudadanos inocentes, como son las sociedades asoladas”.

Calderón calificó de un acto de congruencia y responsabilidad con el país sacar adelante dicha ley. “Y nuestro llamado es a que todos nos hagamos cargo de la responsabilidad que implica la seguridad pública” y en el caso legislativo “no les está pidiendo la nación a los diputados que vayan a combatir a los criminales, simple y sencillamente que cumplan su deber de establecer en blanco y negro la regulación necesaria en materia de seguridad nacional”.

Ante la bancada compuesta por 142 diputados, el Ejecutivo lanzó un “llamado enfático” a proveer claridad a las fuerzas federales para proteger a los ciudadanos de la violencia criminal “porque más allá de los discursos y los rollos políticos que se echan, la gente nos está exigiendo que la protejamos, la gente se siente insegura porque ve a los bandoleros en sus camionetas con sus armas, atemorizando a la gente, secuestrando, violentando, extorsionando”.

Morelia • Lorena López y Daniel Venegas, Milenio, 26 de agosto.