Discuten perredistas y priístas por supuestos delitos electorales

Los presidentes del PRI y PRD continuaron ayer la controversia por la presunta injerencia de gobernadores en el proceso electoral en curso.
El perredista Jesús Zambrano aseveró en entrevista, en el contexto de una reunión entre el Consejo Rector del Pacto por México con alcaldes del país, que a pesar del añadido y del compromiso de los mandatarios de ser neutrales en los comicios continúan las irregularidades.
Anunció que junto con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, los presidentes de los partidos integrantes del pacto y el gobierno federal harán “un corte” esta semana acerca del comportamiento de los mandatarios estatales.
Citó como ejemplo que este miércoles en Quintana Roo, los órganos electorales “actuaron en connivencia con el gobernador (Roberto Borge) y nos tumban tres distritos electorales sin fundamento, o sea, hay una clara actitud de agresión”, sostuvo.
También mencionó situaciones similares en Tlaxcala, Zacatecas y Aguascalientes, donde “no se han instalado mesas plurales (para el blindaje de los recursos públicos)”.
César Camacho Quiroz, del PRI, en entrevista aparte, contestó que el compromiso tiene que ser de todos los partidos, no nada más del suyo.
Pidió que el Pacto por México no se convierta “en rehén de un pasaje de la vida pública, que son las elecciones”.
Aseguró que por importantes que sean, los comicios “no se pueden equiparar en densidad política, en importancia social, al principio de las soluciones que son las reformas trascendentes que este país necesita y han estado postergadas por años”.
Manifestó, sin embargo, que en su caso les preocupa Baja California, donde el gobierno del estado (PAN) “parece no estar de acuerdo” con que “los programas sociales de los ayuntamientos no tengan ningún sesgo partidario”.
Las denuncias contra el ex gobernador de Tabasco, Andrés Granier, también enfrentaron a los dirigentes partidistas.
El perredista Zambrano criticó que no basta con el deslinde del tricolor, porque “el caso Granier es la expresión más burda de la corrupción y de la impunidad”.
Camacho Quiroz respondió: “Los asuntos que puedan constituir un lastre los dejamos atrás, para poder caminar ligeros e ir en busca del apoyo popular”.

Alma Muñoz, Fabiola Martínez y Fabiola Saldierna, La Jornada, 6 de junio.