Tuve frente a mi un DS rojo con negro y un DSi negro. No se ven iguales: el diseño de la nueva portátil de Nintendo es totalmente minimal, liso, sencillo.
Tomé uno en cada mano, pesan casi lo mismo, los abrí y ahí estaban las dos pantallas, más bien cuatro; dos de cada uno (superior y táctil) que en la nueva versión es más grande, lo mismo sucede con el stylus.
El “i” tiene varias novedades: dos cámaras, una exterior y una interior de 0.3 MP, cierto, no son cámaras para fotografías profesionales, sino para cubrir las necesidades de interacción de la consola que tiene una función con varios filtros para jugar con las imágenes que capturas, que luego puedes compartir.
Esta función está divertida, porque es como si estuvieras en los mini juegos de Mario Party. Otra característica en esta onda de pasar el rato, es el player de audio, con él puedes escuchar música en formato AAC (... usaré la palabra recurrente en este texto o adjetivo calificativo para el DSi: interactivo), con los cuales puedes interactuar, es decir, le pones play a una canción y en el pantalla superior aparecen diferentes imágenes que corren al ritmo de la música.
La mejor, por mucho es un escenario de Mario Bros., porque conforme va caminando hay una hilera de monedas sobre su cabeza que si quieres, recolectas con los botones R y L, créanme: es la onda.
Además tienes el poder con el stylus a través de la pantalla táctil de modificar la velocidad de la canción, o cambiar el modo, puede sonar como radio, con eco, o realzar sólo la música o sólo la voz. En este mismo asunto del audio, con el micrófono puedes grabar tu voz o voces, editarlas, distorsionarlas, escucharlas hacia atrás o lo que se te ocurra durante las horas de ocio. Ahora pasemos a las funciones... entre las novedades están el control para padres que permite vigilar el contenido y acceso al software según ESRB, así como la administración de puntos en la tienda de Nintendo DSi, porque habrá una tienda regional desde la cual se pueden comprar juegos, descargarlos y hacer actualizaciones de sistema; gracias a la conexión Wi-Fi.
Para los amantes de la ranura para juegos de Game Boy, temo informarles que ya no existe más, así que si tienen la primera versión de DS mejor consérvenla con cariño, porque no podrán jugarlos en el DSi. Para cargar contenidos, como la música por ejemplo, está la ranura para una tarjeta SD, con tanta capacidad como se desee, a través de ella puedes compartir imágenes y pasarlas al Wii o cargar tu Mii y llevarlo al DSi para modificarlo o jugar con él. Respecto a su interacción con Wii, no es al 100%, hay algunas cosas que se podrán hacer como descarga de contenidos y este asunto de las fotos y los Miis.
Está en las tiendas desde el pasado 5 de abril, el precio sugerido es de 3 mil 899 pesos, no hay bundles (es nada más la consola); los colores disponibles hasta el momento son negro y azul. Está linda y si son fan boys, pues deberán tenerla.
Tomé uno en cada mano, pesan casi lo mismo, los abrí y ahí estaban las dos pantallas, más bien cuatro; dos de cada uno (superior y táctil) que en la nueva versión es más grande, lo mismo sucede con el stylus.
El “i” tiene varias novedades: dos cámaras, una exterior y una interior de 0.3 MP, cierto, no son cámaras para fotografías profesionales, sino para cubrir las necesidades de interacción de la consola que tiene una función con varios filtros para jugar con las imágenes que capturas, que luego puedes compartir.
Esta función está divertida, porque es como si estuvieras en los mini juegos de Mario Party. Otra característica en esta onda de pasar el rato, es el player de audio, con él puedes escuchar música en formato AAC (... usaré la palabra recurrente en este texto o adjetivo calificativo para el DSi: interactivo), con los cuales puedes interactuar, es decir, le pones play a una canción y en el pantalla superior aparecen diferentes imágenes que corren al ritmo de la música.
La mejor, por mucho es un escenario de Mario Bros., porque conforme va caminando hay una hilera de monedas sobre su cabeza que si quieres, recolectas con los botones R y L, créanme: es la onda.
Además tienes el poder con el stylus a través de la pantalla táctil de modificar la velocidad de la canción, o cambiar el modo, puede sonar como radio, con eco, o realzar sólo la música o sólo la voz. En este mismo asunto del audio, con el micrófono puedes grabar tu voz o voces, editarlas, distorsionarlas, escucharlas hacia atrás o lo que se te ocurra durante las horas de ocio. Ahora pasemos a las funciones... entre las novedades están el control para padres que permite vigilar el contenido y acceso al software según ESRB, así como la administración de puntos en la tienda de Nintendo DSi, porque habrá una tienda regional desde la cual se pueden comprar juegos, descargarlos y hacer actualizaciones de sistema; gracias a la conexión Wi-Fi.
Para los amantes de la ranura para juegos de Game Boy, temo informarles que ya no existe más, así que si tienen la primera versión de DS mejor consérvenla con cariño, porque no podrán jugarlos en el DSi. Para cargar contenidos, como la música por ejemplo, está la ranura para una tarjeta SD, con tanta capacidad como se desee, a través de ella puedes compartir imágenes y pasarlas al Wii o cargar tu Mii y llevarlo al DSi para modificarlo o jugar con él. Respecto a su interacción con Wii, no es al 100%, hay algunas cosas que se podrán hacer como descarga de contenidos y este asunto de las fotos y los Miis.
Está en las tiendas desde el pasado 5 de abril, el precio sugerido es de 3 mil 899 pesos, no hay bundles (es nada más la consola); los colores disponibles hasta el momento son negro y azul. Está linda y si son fan boys, pues deberán tenerla.
El Universal, 4 de mayo.
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