Periodistas de diferentes medios de comunicación exigieron frenar la impunidad en los asesinatos de los reporteros ya que, aseguraron, se contabilizan en 50 ejecuciones desde los gobiernos de Vicente Fox, en 2000, y Felipe Calderón, en 2006, hasta la fecha.
“En ninguna época los periodistas mexicanos han podido escapar de la alta peligrosidad, los registros más o menos confiables de asesinatos de personas vinculadas al ejercicio periodístico, indican que la frecuencia entre cada asesinato se ha ido acortando más en los tiempos del panismo gobernante”, aseveró Rogelio Hernández, reportero de asuntos especiales de MILENIO.
En los últimos 29 meses han sido asesinados 13 periodistas, y de ellos los cinco últimos murieron uno cada mes, promedio mucho mayor al de sexenios anteriores, indicó.
Hernández expuso que en el régimen de Luis Echeverría fue asesinado un periodista cada año; en el de José López Portillo, uno cada seis meses; en el de Miguel de la Madrid, uno cada 2.2 meses, y en el de Carlos Salinas, uno cada mes y medio; mientras que en la administración de Ernesto Zedillo fue sólo uno cada tres meses.
No obstante, aunque expuso con base en datos de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados y de la Comisión Nacional, el periodista sostuvo que la visitaduría de la CNDH y la Comisión Especial carecen de la fuerza necesaria para resolver las agresiones, porque, sobre todo, actúan después de que estas ocurren.
El reportero criticó la insuficiencia de los recursos y el personal de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos contra Periodistas de la Procuraduría General de la República que, sentenció, es una instancia “sin dientes”.
Al respecto, aseveró que de nada le servirán ya “los buenos oficios de esas instancias” a Luis Manuel Hernández, Juan Carlos Hernández, Carlos Ortega y a Eliseo Barrón, quienes fueron asesinados en los últimos 100 días a causa de su trabajo.
Al homenaje realizado este sábado a Manuel Buendía, asesinado hace 25 años en la plaza Francisco Zarko, a un costado de la iglesia de San Hipólito, acudieron Miguel Ángel Granados Chapa, Javier Solórzano y Virgilio Caballero.
De alto riesgo
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos señaló en días pasados que los asesinatos, secuestros e intimidaciones a periodistas mostraban una “preocupante tendencia al alza”.
En México el periodismo se ha convertido en una profesión de “alto riesgo”, sobre todo por que estos datos sólo revelan la existencia de casos de los que toma conocimiento la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
“En ninguna época los periodistas mexicanos han podido escapar de la alta peligrosidad, los registros más o menos confiables de asesinatos de personas vinculadas al ejercicio periodístico, indican que la frecuencia entre cada asesinato se ha ido acortando más en los tiempos del panismo gobernante”, aseveró Rogelio Hernández, reportero de asuntos especiales de MILENIO.
En los últimos 29 meses han sido asesinados 13 periodistas, y de ellos los cinco últimos murieron uno cada mes, promedio mucho mayor al de sexenios anteriores, indicó.
Hernández expuso que en el régimen de Luis Echeverría fue asesinado un periodista cada año; en el de José López Portillo, uno cada seis meses; en el de Miguel de la Madrid, uno cada 2.2 meses, y en el de Carlos Salinas, uno cada mes y medio; mientras que en la administración de Ernesto Zedillo fue sólo uno cada tres meses.
No obstante, aunque expuso con base en datos de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados y de la Comisión Nacional, el periodista sostuvo que la visitaduría de la CNDH y la Comisión Especial carecen de la fuerza necesaria para resolver las agresiones, porque, sobre todo, actúan después de que estas ocurren.
El reportero criticó la insuficiencia de los recursos y el personal de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos contra Periodistas de la Procuraduría General de la República que, sentenció, es una instancia “sin dientes”.
Al respecto, aseveró que de nada le servirán ya “los buenos oficios de esas instancias” a Luis Manuel Hernández, Juan Carlos Hernández, Carlos Ortega y a Eliseo Barrón, quienes fueron asesinados en los últimos 100 días a causa de su trabajo.
Al homenaje realizado este sábado a Manuel Buendía, asesinado hace 25 años en la plaza Francisco Zarko, a un costado de la iglesia de San Hipólito, acudieron Miguel Ángel Granados Chapa, Javier Solórzano y Virgilio Caballero.
De alto riesgo
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos señaló en días pasados que los asesinatos, secuestros e intimidaciones a periodistas mostraban una “preocupante tendencia al alza”.
En México el periodismo se ha convertido en una profesión de “alto riesgo”, sobre todo por que estos datos sólo revelan la existencia de casos de los que toma conocimiento la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Gustavo Sánchez, Reforma, 31 de mayo.
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