Cuba, otra vez en la lista negra

WASHINGTON (Agencias).— Estados Unidos mantiene a Cuba, junto a Irán, Sudán y Siria, en su lista de países que patrocinan el terrorismo, según el informe anual sobre el tema que difundió ayer el Departamento de Estado y en el que cuestionó por octavo año consecutivo la escasa cooperación de Venezuela en esa materia.

El documento subraya que Cuba ha dado refugio “desde hace años” a miembros de la organización terrorista vasca ETA y a guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Cuba integra la lista desde 1982, lo que supone la imposición de sanciones como la prohibición de la venta y exportación de armas, prohibición de ayuda económica y restricciones a las transacciones financieras entre ciudadanos.

Según el informe, relativo a 2013, durante el último año han “continuado los informes que indican que los lazos de Cuba con ETA se han vuelto más distantes”. EU reconoce también que “el gobierno de Cuba apoyó y albergó las negociaciones entre las FARC y el gobierno de Colombia destinadas a forjar un proceso de paz entre los dos” y que no hay indicios “de que el gobierno de Cuba proporcionara armas o entrenamiento paramilitar a grupos terroristas”, aunque sigue refugiando “a fugitivos buscados por EU”.

La inclusión de Cuba en la lista mereció en enero la condena de todos los países de Latinoamérica y el Caribe durante la II Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) en La Habana.

De Venezuela, el reporte indica que el gobierno del presidente Nicolás Maduro no tomó acciones en contra de funcionarios venezolanos señalados por el Departamento del Tesoro por respaldar “directamente” actividades de tráfico de armas y narcóticos por parte de las (FARC). Individuos vinculados a las FARC y miembros del rebelde Ejército de Liberación Nacional (ELN) estuvieron presentes en Venezuela, así como partidarios o simpatizantes del islamista radical Partido de Dios (Hezbolá), detalla.

Corea del Norte, Irak y Libia han desaparecido del listado en la última década, a cambio del compromiso de no involucrarse o apoyar el terrorismo en el futuro. En cuanto a Irán, incluido como patrocinador del terrorismo desde 1984, EU afirma que “continuó su actividad” relacionada con esas actividades en 2013.

Respecto a Siria, indica que “continuó su apoyo político a una diversidad de grupos terroristas”, mientras que de Sudán, EU reconoce que cooperó en la lucha antiterrorista, pero sigue siendo “base logística” de “grupos inspirados en Al-Qaeda”.

El Universal, 1º de mayo.