El Presidente prefiere trabajar sin crear “altas expectativas”

Al confesar que el peor enemigo de cualquier político es que se depositen en él muy altas expectativas, por lo que él prefiere trabajar con bajas, el presidente Felipe Calderón admitió que hay pocas esperanzas en la cumbre del clima que se realizará a fin de año en Cancún, pero él procurará que se asuman compromisos contra el calentamiento global, porque no quiere salir con las manos vacías.

“No quiero que perdamos nuestro tiempo y no quiero que después de Cancún nos vayamos con las manos vacías”, dijo Calderón al reconocer que la falta de consenso para adquirir compromisos de reducción de emisiones se deriva de los costos económicos que implican esas acciones.

Al participar en la sesión plenaria del Foro Económico Mundial de Davos con el tema De Copenhage a México: ¿Qué Sigue?, el presidente Calderón dijo haberse dado cuenta de que “hay muy bajas expectativas acerca de Cancún y prefiero bajas expectativas. El peor enemigo de cualquier político, en cualquier Estado, es que se depositen muy altas expectativas. Así que yo prefiero trabajar de esta manera”, sostuvo.

Aceptó que la cumbre realizada en Copenhague el pasado mes de diciembre “fue muy decepcionante”, por lo que debe trabajarse con mucha anticipación de cara a la cumbre en Cancún y también se necesita generar una opinión favorable por parte de la sociedad civil.

“Hay muchísimos problemas que tenemos que arreglar. Tenemos que encontrar un consenso entre los países, sobre todo, los costos económicos de las medidas, sobre todo en los países en desarrollo. No obstante tenemos que trabajar arduamente. No hay tiempo que perder, tenemos que trabajar sobre ese tema. No quiero que tengamos otra Conferencia la ONU sobre el Cambio Climático sin resultados”, dijo el Presidente.

Y aseguró que “México hará todo lo que pueda, todo lo que está en sus manos y espero que tengamos un nuevo mecanismo para el futuro de la humanidad, después de nuestra reunión”.

Consideró que la falta de consenso está relacionada con los problemas económicos en cada nación, porque hay costos asociados a la tarea de luchar contra el cambio climático.

Si se puede encontrar un mecanismo económico con los incentivos correctos para estimular e incentivar las acciones, tanto de los países desarrollados como de los emergentes, “estaremos encaminados y en la vía para llegar a un acuerdo en Cancún”, indicó.

En la sesión, el congresista estadunidense Edward Markey aseguró que el presidente Calderón “va a ser un líder mundial” en el tema del combate al cambio climático, mientras el enviado del primer ministro de India, Shyam Saran, lo felicitó por “la dirección tan clara que ha hecho para tratar de obtener un resultado exitoso” en Cancún.

Se comprometen

El presidente Felipe Calderón advirtió que están claras las evidencias científicas y los efectos del cambio climático y ello se refleja en las afectaciones por inundaciones en Perú, o en la paralización de la actividad económica y la muerte de muchas personas en Francia por las altas temperaturas.

Además, México fue el primero en establecer un compromiso unilateral e incondicional para reducir 50 millones de toneladas al año, a partir de 2012, las emisiones de dióxido de carbono, 30 por ciento en la tendencia hacia 2020 y 50 por ciento para 2050, además de que ha avanzado en materia de reforestación.
Lorena López en Davos, Milenio, 30 de enero.

0 Responses to "El Presidente prefiere trabajar sin crear “altas expectativas”"