El Presidente pide gasto eficaz y solidario; hay que revertir la pobreza, urge

El presidente Felipe Calderón pidió al Congreso de la Unión una asignación justa y equitativa en el Presupuesto de Egresos del próximo año, que atienda las necesidades más urgentes de quienes menos tienen y apoye los programas sociales que han mostrado su eficacia.

“Hago un respetuoso llamado a los legisladores de todos los partidos políticos para que México en el 2010 cuente con una asignación eficaz, justa, equitativa y solidaria de los recursos disponibles que tenemos, y sé que son insuficientes”, señaló el titular del Ejecutivo federal.

Pidió que los recursos se apliquen a programas que sí han demostrado su eficacia y que varias instituciones especializadas demuestran que no tienen efectos regresivos, es decir, que se destinan verdaderamente a quien más lo necesita, en especial los destinados al combate a la pobreza, al apoyo de la educación y en materia de salud.

Al inaugurar la reunión del Centro Mexicano para la Filantropía, Calderón afirmó que “sería irresponsable, dicho en palabras de esta reunión, sería no solidario, y en consecuencia inhumano, no hacernos cargo, como sociedad, de un problema que se exacerbó a consecuencia de una crisis, independientemente, de que no se haya generado en México; se está sufriendo hoy en México”.

Y agregó: “Tenemos que parar a como dé lugar el riesgo de que se expanda la pobreza en el país y acelerar el paso para revertirla”.

Acompañado por su esposa Margarita Zavala, Calderón reconoció que en México más de la mitad de la población vive en la pobreza, y casi 20 millones de mexicanos en pobreza extrema. “Hoy es tiempo de pensar mucho más en ellos, en los que menos tienen”, enfatizó.

En un discurso atestiguado desde una de las puertas de emergencia por el senador perredista Graco Ramírez, presidente de la Comisión de Desarrollo Social, el mandatario advirtió que “si no cerramos la brecha entre el hombre y la naturaleza vamos a exacerbar los problemas de pobreza y de miseria”.

Tras reconocer la labor que realizan las organizaciones civiles dedicadas a la filantropía, el Ejecutivo consideró que, a pesar de que hay menos ingresos en el gobierno, derivado de la crisis económica, “estamos comprometidos a que en el 2010 los beneficios fiscales a las actividades que realizan organizaciones sin fines de lucro y empresas socialmente responsables sigan adelante”.

Mencionó, entre otras, la posibilidad de deducir los donativos entregados a las organizaciones autorizadas y también al compromiso de revisar la forma de agilizar, ampliar y tener un criterio mucho más sensato y racional respecto de quienes pueden ayudar más.

También habló de conservar los apoyos fiscales para las empresas que empleen a adultos mayores o personas con discapacidad.

El primer mandatario reconoció que el gobierno tiene mucho que aprender de lo que hace la sociedad civil a favor de los demás, “porque es en la práctica de la generosidad, de la solidaridad, que no es otra cosa más que el nombre filosófico-social de la caridad humana, donde se aprende lo que el ser humano debe hacer por el otro”.

Pero también les dijo que “ustedes pueden tomar, y sugiero debieran tomar, muchas de las cosas que hace el gobierno, para que en su articulación social aprovechen los programas sociales del gobierno federal y de los gobiernos estatales y se tenga un adecuado uso de los recursos”.

En este sentido, el presidente Calderón dijo que se tiene que revertir que las políticas sociales públicas prescindan de la voluntad de los beneficiarios. “Se requiere una labor de articulación que haga que los grupos de personas beneficiarias participen corresponsablemente en las decisiones y acciones de esos programas”.

Agregó que se debe evitar a toda costa que se cancele el gran esfuerzo que realizan millones y millones de familias para salir adelante.

Cecilia Téllez Cortés, Crónica, 11 de noviembre.