Defensores de derechos humanos y académicos afirmaron que el respeto y promoción de las garantías básicas enfrenta en México un periodo “muy preocupante” ante la creciente violación a los derechos elementales de hombres y mujeres, en un contexto de “acciones de gobierno autoritarias”.
Al conmemorar los 25 años de la Academia Mexicana de Derechos Humanos (AMDH), Miguel Concha Malo, vicepresidente de la institución y director del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, afirmó que en el ámbito de su competencia, toda autoridad debe estar obligada a promover, respetar y proteger estas garantías, de lo contrario –advirtió–, “ni hay derechos humanos ni participación social ni reforma del Estado. Hoy vivimos al revés de la historia: se celebran la impunidad, la corrupción y la desvergüenza”.
Reunidos en el auditorio de la Coordinación de Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México, miembros distinguidos y ex directores de la AMDH recordaron el surgimiento de la academia como un organismo plural, cuya función se centró en la atención a los grupos más vulnerables, así como a la promoción y defensa de la cultura de los derechos humanos en el país.
En tanto, el obispo Samuel Ruiz, integrante del consejo consultivo de la AMDH, destacó que después de 25 años del surgimiento del organismo, persiste una “lamentable trayectoria de violación a los derechos humanos, pues a pesar de que se presentan las denuncias, continúan las transgresiones de instancias oficiales, como el Ejército y los cuerpos policiacos”.
Afirmó que desde principios de la década de los 80, México ha vivido una escalada de violencia institucional cada vez más prepotente y agresiva de quienes, “se supone, deben defender nuestras garantías individuales y colectivas”.
Criminalización y denostación
Los distintos gobiernos que se han instalado en la Presidencia de la República –abundó– “se han distinguido por violar sistemáticamente los derechos del pueblo”, pues a los abusos cometidos por cuerpos policiacos y el Ejército se suman “amenazas, persecución, desaparición forzada, tortura, encarcelamiento injusto y ejecución sumaria, así como la criminalización de la protesta social y la denostación de la defensa de los derechos humanos y la ecología”.
El legislador petista Porfirio Muñoz Ledo, integrante del grupo fundador de la AMDH, aseguró que hoy más que nunca el papel que realiza la academia es “trascendente, pues si bien se ha logrado avanzar en la creación de una cultura de los derechos humanos, esto corresponde a un periodo donde vivimos su más flagrante violación, lo que constituye una terrible paradoja”, ante la creciente degradación en el cumplimiento y defensa de las garantías básicas.
Por su parte, la presidenta de la AMDH, Gloria Ramírez, afirmó: “enfrentamos un escenario de claroscuros en la defensa de los derechos humanos en México, pues si bien ha habido avances en estos 25 años de trabajo, también hay preocupación porque nos enfrentamos a una falta de atención y, más aún, a una simulación en el cumplimiento de estos derechos, a lo que se suma la falta de atención a la víctima y de reparación del daño”.
Entre los retos del organismo, indicó que será tarea central impulsar el compromiso para elaborar un programa nacional de educación en derechos humanos, suscrito durante el acto por autoridades de las secretarías de Educación y Gobernación, a fin de consolidar la cultura y promoción de estas garantías.
Como parte de los festejos por el 25 aniversario de la AMDH, se entregaron reconocimientos a instituciones que han apoyado el trabajo de la organización mediante financiamiento, como la delegación de la Comisión Europea en México y el Instituto de las Mujeres de la ciudad de México.
Al conmemorar los 25 años de la Academia Mexicana de Derechos Humanos (AMDH), Miguel Concha Malo, vicepresidente de la institución y director del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, afirmó que en el ámbito de su competencia, toda autoridad debe estar obligada a promover, respetar y proteger estas garantías, de lo contrario –advirtió–, “ni hay derechos humanos ni participación social ni reforma del Estado. Hoy vivimos al revés de la historia: se celebran la impunidad, la corrupción y la desvergüenza”.
Reunidos en el auditorio de la Coordinación de Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México, miembros distinguidos y ex directores de la AMDH recordaron el surgimiento de la academia como un organismo plural, cuya función se centró en la atención a los grupos más vulnerables, así como a la promoción y defensa de la cultura de los derechos humanos en el país.
En tanto, el obispo Samuel Ruiz, integrante del consejo consultivo de la AMDH, destacó que después de 25 años del surgimiento del organismo, persiste una “lamentable trayectoria de violación a los derechos humanos, pues a pesar de que se presentan las denuncias, continúan las transgresiones de instancias oficiales, como el Ejército y los cuerpos policiacos”.
Afirmó que desde principios de la década de los 80, México ha vivido una escalada de violencia institucional cada vez más prepotente y agresiva de quienes, “se supone, deben defender nuestras garantías individuales y colectivas”.
Criminalización y denostación
Los distintos gobiernos que se han instalado en la Presidencia de la República –abundó– “se han distinguido por violar sistemáticamente los derechos del pueblo”, pues a los abusos cometidos por cuerpos policiacos y el Ejército se suman “amenazas, persecución, desaparición forzada, tortura, encarcelamiento injusto y ejecución sumaria, así como la criminalización de la protesta social y la denostación de la defensa de los derechos humanos y la ecología”.
El legislador petista Porfirio Muñoz Ledo, integrante del grupo fundador de la AMDH, aseguró que hoy más que nunca el papel que realiza la academia es “trascendente, pues si bien se ha logrado avanzar en la creación de una cultura de los derechos humanos, esto corresponde a un periodo donde vivimos su más flagrante violación, lo que constituye una terrible paradoja”, ante la creciente degradación en el cumplimiento y defensa de las garantías básicas.
Por su parte, la presidenta de la AMDH, Gloria Ramírez, afirmó: “enfrentamos un escenario de claroscuros en la defensa de los derechos humanos en México, pues si bien ha habido avances en estos 25 años de trabajo, también hay preocupación porque nos enfrentamos a una falta de atención y, más aún, a una simulación en el cumplimiento de estos derechos, a lo que se suma la falta de atención a la víctima y de reparación del daño”.
Entre los retos del organismo, indicó que será tarea central impulsar el compromiso para elaborar un programa nacional de educación en derechos humanos, suscrito durante el acto por autoridades de las secretarías de Educación y Gobernación, a fin de consolidar la cultura y promoción de estas garantías.
Como parte de los festejos por el 25 aniversario de la AMDH, se entregaron reconocimientos a instituciones que han apoyado el trabajo de la organización mediante financiamiento, como la delegación de la Comisión Europea en México y el Instituto de las Mujeres de la ciudad de México.
Laura Poy Solano, La Jornada, 28 de noviembre.
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