En la discusión del Presupuesto de Egresos 2010, que hoy comienza en la Cámara de Diputados, de manera formal, el PRI garantizó que corregirá “las grandes debilidades del modelo económico vigente”, y promoverá los cambios que requiere el país para iniciar el crecimiento.
El coordinador de la bancada priista, Francisco Rojas Gutiérrez, dijo que su partido va por una drástica reducción del gasto corriente de los tres poderes y los organismos autónomos, y por el privilegio en el gasto de inversión en infraestructura.
Por su parte, el PRD, en voz de su diputado Armando Ríos Piter, advirtió que el reto de esta negociación es “quitar de en medio a las clientelas que tradicionalmente se aprovechan del presupuesto”, es decir, los gobernadores, particularmente, pero además organizaciones partidistas, sindicalistas, obreras y hasta entidades del sector privado que buscan “su tajada” cada año.
La Ley de Ingresos aprobada en días pasados por el Congreso prevé recursos para la nación por 3 billones 176 mil 322 millones de pesos, de los cuales prácticamente el 90 por ciento, es decir, cerca de 2 billones 900 mil millones de pesos, “está comprometido”.
Por eso “la cobija es muy pequeña”, porque el presupuesto representa, entre otros rubros, el pago de los salarios de médicos y enfermeras, maestros, servidores públicos, los diversos fondos para las entidades federativas, y los gastos irreductibles para partidos políticos y órganos autónomos como las universidades, el IFE, la CNDH y el IFAI, puntualizó por su parte el panista Luis Enrique Mercado.
Al respecto, cabe destacar que los gobernadores de la república, sin excepción, convirtieron los pasados 10 días a la Cámara de Diputados en una auténtica “pasarela” en la que pidieron recursos adicionales por encima de los 230 mil millones de pesos.
El líder priista en San Lázaro, Francisco Rojas, dijo que en la discusión del presupuesto su bancada impulsará la reducción del gasto corriente en el Ejecutivo y en los poderes Legislativo y Judicial, así como en los organismos autónomos.
Al mismo tiempo, sostuvo, impulsará el aumento de la inversión pública, principalmente en carreteras, obras hidráulicas, el equipamiento en escuelas y hospitales, así como el fomento de sectores estratégicos como el agropecuario y de las Pymes (pequeñas y medianas empresas).
“El compromiso de los priistas no termina con la aprobación del paquete fiscal; nos queda por delante promover cambios para el crecimiento sustentable y la corrección de las grandes debilidades del modelo vigente”, expuso.
Rojas Gutiérrez señaló que el PRI está resuelto a proponer acciones que faciliten a los gobiernos federal, estatales y municipales la adecuada atención de las demandas sociales, que fortalezcan sus fuentes de recursos y adopten un sistema presupuestario capaz de promover la eficiencia, la transparencia y la rendición de cuentas.
Reiteró que la Cámara de Diputados aprobará a más tardar el próximo 15 de noviembre el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2010, con vistas a que el gasto público sea un instrumento eficaz para atenuar los efectos de la crisis sobre las familias de los agricultores, trabajadores y pequeños y medianos empresarios del país.
Por separado, el coordinador de política económica del PAN, Luis Enrique Mercado, reconoció la dificultad que tiene la negociación del Presupuesto, ya que “la cobija es muy pequeña” para un país que enfrenta graves problemas derivados de la situación financiera internacional.
Confió en la responsabilidad de todas las bancadas para sacar adelante el gasto público del país, y aseguró que el día 15 de este mes “habrá un buen presupuesto para México”.
El diputado del PRD Armando Ríos Piter refirió que su bancada trabaja desde hace días en la definición de las prioridades para el presupuesto del año próximo, que tendrá que ver, dijo, con inversiones para el crecimiento económico, pero sobre todo para el sector social, que ha sido sin duda el más perjudicado por la crisis y “el mayor damnificado” por la Ley de Ingresos aprobada recientemente.
El coordinador de la bancada priista, Francisco Rojas Gutiérrez, dijo que su partido va por una drástica reducción del gasto corriente de los tres poderes y los organismos autónomos, y por el privilegio en el gasto de inversión en infraestructura.
Por su parte, el PRD, en voz de su diputado Armando Ríos Piter, advirtió que el reto de esta negociación es “quitar de en medio a las clientelas que tradicionalmente se aprovechan del presupuesto”, es decir, los gobernadores, particularmente, pero además organizaciones partidistas, sindicalistas, obreras y hasta entidades del sector privado que buscan “su tajada” cada año.
La Ley de Ingresos aprobada en días pasados por el Congreso prevé recursos para la nación por 3 billones 176 mil 322 millones de pesos, de los cuales prácticamente el 90 por ciento, es decir, cerca de 2 billones 900 mil millones de pesos, “está comprometido”.
Por eso “la cobija es muy pequeña”, porque el presupuesto representa, entre otros rubros, el pago de los salarios de médicos y enfermeras, maestros, servidores públicos, los diversos fondos para las entidades federativas, y los gastos irreductibles para partidos políticos y órganos autónomos como las universidades, el IFE, la CNDH y el IFAI, puntualizó por su parte el panista Luis Enrique Mercado.
Al respecto, cabe destacar que los gobernadores de la república, sin excepción, convirtieron los pasados 10 días a la Cámara de Diputados en una auténtica “pasarela” en la que pidieron recursos adicionales por encima de los 230 mil millones de pesos.
El líder priista en San Lázaro, Francisco Rojas, dijo que en la discusión del presupuesto su bancada impulsará la reducción del gasto corriente en el Ejecutivo y en los poderes Legislativo y Judicial, así como en los organismos autónomos.
Al mismo tiempo, sostuvo, impulsará el aumento de la inversión pública, principalmente en carreteras, obras hidráulicas, el equipamiento en escuelas y hospitales, así como el fomento de sectores estratégicos como el agropecuario y de las Pymes (pequeñas y medianas empresas).
“El compromiso de los priistas no termina con la aprobación del paquete fiscal; nos queda por delante promover cambios para el crecimiento sustentable y la corrección de las grandes debilidades del modelo vigente”, expuso.
Rojas Gutiérrez señaló que el PRI está resuelto a proponer acciones que faciliten a los gobiernos federal, estatales y municipales la adecuada atención de las demandas sociales, que fortalezcan sus fuentes de recursos y adopten un sistema presupuestario capaz de promover la eficiencia, la transparencia y la rendición de cuentas.
Reiteró que la Cámara de Diputados aprobará a más tardar el próximo 15 de noviembre el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2010, con vistas a que el gasto público sea un instrumento eficaz para atenuar los efectos de la crisis sobre las familias de los agricultores, trabajadores y pequeños y medianos empresarios del país.
Por separado, el coordinador de política económica del PAN, Luis Enrique Mercado, reconoció la dificultad que tiene la negociación del Presupuesto, ya que “la cobija es muy pequeña” para un país que enfrenta graves problemas derivados de la situación financiera internacional.
Confió en la responsabilidad de todas las bancadas para sacar adelante el gasto público del país, y aseguró que el día 15 de este mes “habrá un buen presupuesto para México”.
El diputado del PRD Armando Ríos Piter refirió que su bancada trabaja desde hace días en la definición de las prioridades para el presupuesto del año próximo, que tendrá que ver, dijo, con inversiones para el crecimiento económico, pero sobre todo para el sector social, que ha sido sin duda el más perjudicado por la crisis y “el mayor damnificado” por la Ley de Ingresos aprobada recientemente.
Luciano Franco, Crónica, 9 de noviembre.
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