La noticia de que los cubanos podrán adquirir teléfonos celulares causó indiferencia en un gran sector de la población, sin recursos para acceder a un servicio muy caro en la Isla, donde el salario medio ronda los 410 pesos, unos 18 dólares.
"Abrir una línea de celular cuesta 111 cucs (divisa local que vale 1.08 dólares), más el precio del aparatico y el consumo. Ni en sueños puedo pagar yo esa cantidad", dijo a REFORMA un arquitecto jubilado.
Pero entre los jóvenes el anuncio se recibió con un suspiro de alivio.
"¡Ya era hora! Hablar es caro, pero uno puede utilizar el celular sólo para enviar y recibir mensajes o para estar localizado", opinó un universitario que recibe euros de Italia, donde vive su madre.
Llamar por sistema de prepago cuesta 50 centavos de cuc el minuto, y recibir una llamada, 46 centavos, según precisó un directivo de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba.
"Abrir una línea de celular cuesta 111 cucs (divisa local que vale 1.08 dólares), más el precio del aparatico y el consumo. Ni en sueños puedo pagar yo esa cantidad", dijo a REFORMA un arquitecto jubilado.
Pero entre los jóvenes el anuncio se recibió con un suspiro de alivio.
"¡Ya era hora! Hablar es caro, pero uno puede utilizar el celular sólo para enviar y recibir mensajes o para estar localizado", opinó un universitario que recibe euros de Italia, donde vive su madre.
Llamar por sistema de prepago cuesta 50 centavos de cuc el minuto, y recibir una llamada, 46 centavos, según precisó un directivo de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba.
Nota de Yolanda Martínez, corresponsal, Reforma, 29 de marzo.
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