La mayoría de los cubanos desconocía hoy el profundo malestar generado en México por la decisión del gobierno de la isla de suspender desde hace nueve días los vuelos regulares entre los dos países, como parte de sus medidas para evitar la entrada al país del virus de la influenza humana, conocido como A/H1N1.
Los medios locales no han hecho referencia alguna ni a las críticas a La Habana de la canciller Patricia Espinosa y mucho menos a las declaraciones del presidente Felipe Calderón, quien dijo que no podría visitar la isla por la decisión unilateral cubana.
Los noticieros de radio y televisión informaron hoy, únicamente, acerca de la evolución de los acontecimientos sanitarios en México y reprodujeron fragmentos de unas declaraciones de Felipe Calderón a la CNN, en las que el mandatario mexicano defendió las medidas sanitarias adoptadas por su gobierno, aunque dijo que a pesar de ellas “el virus sigue ahí”.
Calderón había anunciado que viajaría a La Habana este año y, en reciprocidad, el mandatario Raúl Castro confirmó que haría lo mismo en 2009, con lo cual culminaría un trabajo persistente de tres años para recomponer las relaciones entre los dos gobiernos, deterioradas durante la administración de Vicente Fox. Sin embargo, ahora “todo se puede venir abajo”, según analistas.
Funcionarios del gobierno cubano y diplomáticos mexicanos mantienen total silencio en torno al tema.
Mexicana de Aviación, por su parte, mantiene en servicio un vuelo nocturno entre Cancún y La Habana para sacar de la isla a nacionales que viajaron en medio de las condiciones actuales y que deben regresar a su país.
Los medios locales no han hecho referencia alguna ni a las críticas a La Habana de la canciller Patricia Espinosa y mucho menos a las declaraciones del presidente Felipe Calderón, quien dijo que no podría visitar la isla por la decisión unilateral cubana.
Los noticieros de radio y televisión informaron hoy, únicamente, acerca de la evolución de los acontecimientos sanitarios en México y reprodujeron fragmentos de unas declaraciones de Felipe Calderón a la CNN, en las que el mandatario mexicano defendió las medidas sanitarias adoptadas por su gobierno, aunque dijo que a pesar de ellas “el virus sigue ahí”.
Calderón había anunciado que viajaría a La Habana este año y, en reciprocidad, el mandatario Raúl Castro confirmó que haría lo mismo en 2009, con lo cual culminaría un trabajo persistente de tres años para recomponer las relaciones entre los dos gobiernos, deterioradas durante la administración de Vicente Fox. Sin embargo, ahora “todo se puede venir abajo”, según analistas.
Funcionarios del gobierno cubano y diplomáticos mexicanos mantienen total silencio en torno al tema.
Mexicana de Aviación, por su parte, mantiene en servicio un vuelo nocturno entre Cancún y La Habana para sacar de la isla a nacionales que viajaron en medio de las condiciones actuales y que deben regresar a su país.
Manuel Juan Somoza en La Habana, Milenio, 9 de mayo.
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