El tema provocó uno de los debates más largos de la madrugada de ayer, cuando se ratificó la Ley de Ingresos 2010.
El panista Javier Corral insistió en que no es sano para el país someterse a las decisiones de las televisoras y las compañías más poderosas, pues eso no les garantiza un futuro político.
El pasado viernes, el Senado de la República enmendó la plana a los diputados al derogar el artículo transitorio 244 E de la Ley Federal de Derechos que determinaba que el pago de impuestos por la concesión obtenida del Estado sería diferido a cinco años, y en el primer año solamente deberían pagar 2%.
La exención del gravamen es de 5 mil 600 millones de pesos a operadores que resulten concesionarios de la banda de frecuencia del espectro radioeléctrico.
Corral celebró la decisión de los senadores con el argumento de que “es un privilegio fiscal indebido para unos cuantos, mientras que a la población en general el paquete le ha impuesto varias cargas fiscales y varios aumentos de tasas impositivas”.
Rendición de políticos
“Mi discurso busca reivindicar la política frente al absurdo que vive en una lógica de rendición frente a los poderes fácticos que logran imponernos a veces el miedo, a veces el chantaje. Porque los poderes fácticos son especialistas en blandir la amenaza de que el que se mete a legislar, a regular o a tratar de oponerse a sus intereses, no sale en la televisión. Y el que no sale en la televisión no existe en política. ¿A quién le entregan su voto cuando lo hacen? ¿A qué intereses finalmente estamos sirviendo?”, cuestionó Javier Corral Jurado.
El petista Jaime Cárdenas acusó a Cano de prestanombres de Manlio Fabio Beltrones.
“El senador Beltrones actuó así, porque así se lo pidieron las televisoras. Todo mundo sabe eso, ¿quién es el autor?, no es Cano Vélez, él sólo es un prestanombres. El autor de la iniciativa se llama Manlio Fabio Beltrones. Y los verdaderos autores son los dueños de Televisa y de las grandes empresas mediáticas de este país”, aseguró Jaime Cárdenas.
Propuesta huérfana
El debate en torno a la decisión del PRI de remendar la plana a lo modificado por el Senado de la República para no permitir privilegios al pago de impuestos por la concesión del espectro radioeléctrico, se centró en la imposibilidad de demostrar cómo se insertó esa propuesta en el paquete económico, pues no venía en las iniciativas presidenciales, y ningún diputado presentó ante el pleno la iniciativa respectiva.
Incluso, el Partido de la Revolución Democrática solicitó formalmente vía transparencia que se le explicara el origen de esa propuesta, pero solamente recibieron las respuesta de que era una iniciativa presentada por integrantes en general, y no por algún diputado particular.
Cano defendió que las empresas que van a ganar, una televisora y otra telefónica, invertirán mucho en el triple play por lo que debe comprenderse su imposibilidad de pagar impuestos que superarían los 5 mil millones.
“México no es el primer país que busca otorgar algunas condiciones que favorezcan el inicio de la explotación de una banda de frecuencias. Ejemplo de ello se ha podido observar en Estados Unidos y Francia, países que se caracterizan por el elevado grado de competencia en el sector de telecomunicaciones, sino por los avanzados servicios de telecomunicaciones móviles a los que la población tiene acceso”, dijo.
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