… y AMLO anuncia movilizaciones contra la “privatización”

Un aporreado letrero anunciaba el cierre temporal por mantenimiento del museo nómada de Gregory Colbert. Pero en la realidad no fue necesario traspasar la estructura de bambú para estar entre ceniza y nieve.

Ahí, en el mitin convocado por Andrés Manuel López Obrador para defender el petróleo no había más que cenizas de un movimiento que ya no es el de aquel verano del 2006 y cuyos latidos son, cada vez más, exclusivos de incondicionales… Entre ellos Ebrard y Encinas.

Y fue abundante la nieve, con discursos gélidos que acabaron por aplacar el júbilo mostrado camino al Zócalo. Frente a esa bola helada los oradores olvidaron el tema petrolero y en busca de un alarido multitudinario recurrieron a frases nostálgicas: “Viva nuestro líder Andrés Manuel”.

De esas frases abusó el líder del PT Alberto Anaya: sin ideas ni propuestas acabó por formular un catálogo de loas lopezobradoristas que incluyeron abrazos y besos de mano.
¿Cómo encender a la muchedumbre nevada?…

Claudia Sheinbaum, que antecedió el discurso de López Obrador, lo intentó parafraseando canciones de la Santanera: “Lo saben, lo saben”… Y luego optó por explotar sus cualidades pugilísticas y, cual fajadora, retó a la Secretaria de Energía Georgina Kessel a un mano a mano.
“Desde aquí la invito a debatir”, le dijo con un tono embravecido… “Vaya por sus técnicos gringos y españoles, aquí la espero junto a los técnicos mexicanos”.

Y el hielo se derritió, más aún cuando adelantó que serán las mujeres quienes encabezarán la resistencia civil por el petróleo con cercos en los aeropuertos e instalaciones estratégicas del país, además de cierres carreteros. “Atrévanse y nos verán en las calles, al frente de los comandos”, advirtió. Y las damas respondieron con alaridos locos, imaginándose ya en el fuego cruzado.

“En esta batalla a los hombres les toca cargar los molcajetes y traer las tortillas”, detalló Jesusa Rodríguez.

Y no más: la nieve de Colbert volvió, a veces en forma de copos gigantescos y a veces como un granizo frágil al que se intentó frenar con alusiones gallegas… Porque ya no fue Felipe Calderón quien inspiró los chasquidos maternales, sino el Secretario de Gobernación Juan Camilo Mouriño, el hombre al que reiteraron en la plaza pública que no habrá paz de persistir en sus negocios familiares.

Lo dijo Leonel Cota, lo advirtió López Obrador: “El despojo será fuente de fricciones y conflictos”.
La multitud soportó la diatriba del presidente legítimo y aunque no se llegó a la euforia de antaño sí brotaron gritos de respaldo: “No estás solo, no estás solo… Duro, duro, duro”.

Habían llegado ya a la Plaza de la Constitución los taxistas piratas del Grupo Pantera y los integrantes del Frente Popular Francisco Villa, quienes pasadas las 4 de la tarde desquiciaron la calzada de Tlalpan con cornetas y banderolas, algunas en apoyo a los mexicanos que murieron el primero de marzo en un campamento de las FARC y en repudio al presidente colombiano Álvaro Uribe… “Castigo, castigo”, gritaban entre mentadas de los automovilistas.

Pero ni las voces pro-farquistas ni los cohetones transportados desde el Estado de México lograron vencer la escarcha.

Ya sin políticos en el presidium, el ambiente repuntó con música de guaracha y bamboleos de siete mujeres vestidas de petroleras. “El petróleo es nuestro”, cantaban a ritmo cumbianchero, al que se unió con un par de carambolas la señora Sheinbaum, ya sin pistas de aquella mujer brava que había retado a Georgina Kessel a una reyerta con pellizcos y jaladas de greña…
Crónica de Daniel Blancas Madrigal, Crónica, 19 de marzo.

0 Responses to "… y AMLO anuncia movilizaciones contra la “privatización”"