Candidatos anteponen ataques a propuestas

Los candidatos Ángel Aguirre Rivero y Manuel Añorve Baños afrontaron el primer debate en la historia electoral de Guerrero entre acusaciones y señalamientos sobre sus pasados políticos. El panista Marcos Efrén Parra Gómez se concentró en proponer y recriminar a sus contrapartes los “malos” gobiernos en la entidad.

Los ejes temáticos Sociedad, Economía, Gobierno y Reforma del Estado fueron la plataforma para que en un lapso de dos horas y media los aspirantes a suceder al perredista Zeferino Torreblanca Galindo utilizaran cámaras y micrófonos para criticar la mala actuación de sus adversarios.

Cualquier tema, como el agua, la presa La Parota, inseguridad, pobreza y trato a los indígenas, sirvió de pretexto para que los dos principales contendientes se lanzaran acusaciones de su desempeño en el pasado.

El ex priísta Aguirre Rivero, ahora postulado por una alianza encabezada por el PRD, aclaró a sus adversarios que representa una “candidatura ciudadana”. Repudió la difusión de un instructivo —presuntamente por grupos afines al PRI— para promover la “guerra sucia” y urgió a la sociedad a no enrarecer el proceso.

Se lanzó contra el gobierno de Añorve Baños al frente de la alcaldía de Acapulco, por la inversión de varios millones de pesos en la construcción de un puente, que a la vuelta de meses reporta fallas y ninguna utilidad.

El priísta Añorve calificó a Aguirre Rivero de mentiroso, porque, dijo, a diario usa el Puente Bicentenario para llegar temprano a su partido político.

El perredista dijo no entender al candidato priísta que hasta hace unos meses echaba porras al gobernador Zeferino Torreblanca Galindo, emanado del PRD, y le decía “jefazo”, como alguna vez también llegó a decirle a él.

Las agresiones siguieron y en el bloque sobre Reforma del Estado, el perredista recordó que cuando fue gobernador interino (1997-1999) quien fungió como su secretario de Finanzas, refiriéndose a Añorve, fue testigo que durante tres años no incrementó ni un peso la deuda pública.

Sin embargo, refirió, hoy hay ayuntamientos que a menos de dos años han pedido una deuda pública de casi 100 mil millones de pesos y se preguntó ¿dónde están las obras?, ¿dónde se han publicado esos recursos?.

Añorve Baños mostró documentos en tres ocasiones recordando a su contrincante Aguirre Rivero que cuando fue gobernador interino hubo personas golpeadas y reprimidas. También mostró la foto del ex edil de Acapulco, Félix Salgado, quien aseguró que dejó una deuda millonaria al igual que el organismo operador del agua Capama.

En el tema de seguridad, le recordó al perredista que en su gobierno se castigó y golpeó a los luchadores sociales, entre ellos a los estudiantes de Isidro Burgos de la Normal de Ayotzinapa, contabilizando en ese tiempo la Comisión Estatal de Derechos Humanos 975 recomendaciones.

La inseguridad es insostenible y miles de crímenes siguen sin ser esclarecidos, comentó Manuel Añorve Baños. Se comprometió a investigar el caso Armando Chavarría.

El panista Parra Gómez enfatizó que su instituto enfrenta no sólo a dos primos del PRI, si no a seis partidos “montoneros”, en alusión a las coaliciones Guerrero nos Une y Tiempos mejores para Guerrero, conformadas por PRD-PT-Convergencia y PRI-Verde-Panal, respectivamente.

“Estoy ahora enfrentándome en un debate que seguramente pasará como récord Guinness, es la primera vez que un candidato de un partido se enfrenta a dos priístas primos y a seis partidos políticos que demuestran en los hechos no ser grandes, más bien son montoneros, la compra de votos hay que rechazarla”.

Casi al término del debate, Parra Gómez señaló que Guerrero no puede seguir inmerso en lo mismo, de candidatos emanados del mismo partidos, sumido en la pobreza. En su lugar, ofreció un clima de oportunidades, libertad de expresión, y un cambio.

Al encuentro, organizado por el Instituto Estatal Electoral de Guerrero en el salón Cabaret del Grand Hotel de Acapulco, sólo tuvieron acceso 45 seguidores de los tres candidatos, además de policías de civil y uniformados. Los medios de comunicación quedaron relegados en otro salón.

Al concluir sus participaciones, los candidatos Aguirre Rivero y Añorve Baños sellaron su encuentro electoral con un saludo y un abrazo ante la mirada de los seguidores de ambos políticos. Los tres aspirantes programaron actividades en el puerto.

El presidente del Instituto Estatal Electoral de Guerrero (IEEG), Gustavo Ramos Castro, señaló que el máximo órgano democrático de elecciones “cumplió” con su tarea con un debate de “buen nivel”, sin agresiones verbales y que los verdaderos vencedores del ejercicio fueron los guerrerenses, en alusión a que al término del ejercicio, los candidatos del PRI y PRD se dijeron vencedores del encuentro.

Dijo que el órgano cumplió con la labor de cuidar la equidad del debate y que por ser la primera vez que se realiza en la entidad, hubo complicaciones que fueron subsanadas. “A partir de hoy se tienen mayores argumentos para que el 30 de enero salgan a votar por el candidato de su preferencia”.

Sánchez continúa grave: médico

El neurocirujano Rodolfo Ondarza informó ayer en la ciudad de México que las probabilidades de muerte del representante electoral del PRD en Guerrero, Guillermo Sánchez Nava, aún son altas, debido al extenso daño en el cuerpo por los golpes recibidos.

Al actualizar el parte médico, frente a Raúl y Javier Sánchez Carrera —hijos del político—, Ondarza sostuvo que existe afectación en el tallo cerebral, lo que da posibilidades de que existan secuelas permanentes.

El doctor encargado de la atención del perredista dijo que será sometido a una cirugía para desahogar el hematoma de mayor magnitud que presenta. El representante electoral está inconsciente y se le ha colocado una sonda.
Adriana Covarrubias corresponsal, EL Universal, 19 de enero.

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