La Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) presumió ayer la belleza de sus mujeres y su solvencia económica.
En medio de la crisis que enfrentan los trabajadores por el alza de precios, la central obrera priista no escatimó recursos para elegir a su Señorita Ecomundo CROC 2010.
Hijas de trabajadoras afiliadas y estudiantes becadas por la organización lucieron sus encantos en una competencia para ser la imagen de la CROC este año.
En el salón de un costoso hotel de la Colonia Nápoles en el Distrito federal, mientras las jóvenes de entre 18 y 23 años convencían a los asistentes con su simpatía y belleza, los meseros servían sin escatimar antojitos mexicanos y bebidas.
El objetivo del concurso, según la organización, es que la ganadora promueva el cuidado al medio ambiente y también los programas sociales a favor de los trabajadores, aunque ninguna de las participantes se acordó al menos de mencionar a la clase obrera.
El organizador del evento, líder de la CROC en Cancún, Mario Machuca, defendió el interés de la CROC en este tipo de eventos, al sostener que contribuyen a fomentar una actitud optimista.
"Porque si tenemos tantos problemas y nos sumimos en los mismos entonces no hay optimismo, cuando menos hay que buscar la actividad recreativa (...) estos eventos nos ayudan a relacionarnos con mucha gente que podemos ayudar", justificó.
Incluso reconoció que además del patrocinio de empresas, la CROC desembolsó más de 200 mil pesos por las dos horas y media que duró el concurso.
Eso sin incluir los gastos que algunos líderes de la central en los Estados ya habían hecho para el traslado de las concursantes y sus familiares, el traje típico y hasta las matracas para apoyar a su favorita.
La ganadora, además de ser durante 2011 la imagen de la CROC, obtuvo un premio económico de 5 mil pesos y un viaje a Cancún; la del segundo lugar, 3 mil pesos y una cena en el restaurante de su elección en el Estado que representó; la del tercer lugar obtuvo 2 mil pesos.
Algunas participantes ni siquiera sabían cuál fue el aumento al salario mínimo.
Mariela, de 18 años, lucía su habilidad para caminar con enormes tacones, aunque su destreza se veía disminuida cuando malabareaba para que su traje típico permaneciera abierto mostrando el mapa de su Estado, Chiapas.
La Central Obrera desinfló sus protestas por el aumento salarial que aprobó la Comisión de Salarios Mínimos, no ha dado una postura oficial luego de que el Gobierno federal pidiera no alarmarse por el alza de precios, pero ya tiene su Señorita CROC.
En medio de la crisis que enfrentan los trabajadores por el alza de precios, la central obrera priista no escatimó recursos para elegir a su Señorita Ecomundo CROC 2010.
Hijas de trabajadoras afiliadas y estudiantes becadas por la organización lucieron sus encantos en una competencia para ser la imagen de la CROC este año.
En el salón de un costoso hotel de la Colonia Nápoles en el Distrito federal, mientras las jóvenes de entre 18 y 23 años convencían a los asistentes con su simpatía y belleza, los meseros servían sin escatimar antojitos mexicanos y bebidas.
El objetivo del concurso, según la organización, es que la ganadora promueva el cuidado al medio ambiente y también los programas sociales a favor de los trabajadores, aunque ninguna de las participantes se acordó al menos de mencionar a la clase obrera.
El organizador del evento, líder de la CROC en Cancún, Mario Machuca, defendió el interés de la CROC en este tipo de eventos, al sostener que contribuyen a fomentar una actitud optimista.
"Porque si tenemos tantos problemas y nos sumimos en los mismos entonces no hay optimismo, cuando menos hay que buscar la actividad recreativa (...) estos eventos nos ayudan a relacionarnos con mucha gente que podemos ayudar", justificó.
Incluso reconoció que además del patrocinio de empresas, la CROC desembolsó más de 200 mil pesos por las dos horas y media que duró el concurso.
Eso sin incluir los gastos que algunos líderes de la central en los Estados ya habían hecho para el traslado de las concursantes y sus familiares, el traje típico y hasta las matracas para apoyar a su favorita.
La ganadora, además de ser durante 2011 la imagen de la CROC, obtuvo un premio económico de 5 mil pesos y un viaje a Cancún; la del segundo lugar, 3 mil pesos y una cena en el restaurante de su elección en el Estado que representó; la del tercer lugar obtuvo 2 mil pesos.
Algunas participantes ni siquiera sabían cuál fue el aumento al salario mínimo.
Mariela, de 18 años, lucía su habilidad para caminar con enormes tacones, aunque su destreza se veía disminuida cuando malabareaba para que su traje típico permaneciera abierto mostrando el mapa de su Estado, Chiapas.
La Central Obrera desinfló sus protestas por el aumento salarial que aprobó la Comisión de Salarios Mínimos, no ha dado una postura oficial luego de que el Gobierno federal pidiera no alarmarse por el alza de precios, pero ya tiene su Señorita CROC.
Leslie Gómez, Reforma, 16 de enero.
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