Migración intenta detener a la activista Elvira Arellano en Chiapas

Agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) intentaron detener ayer a la coordinadora de la organización defensora de derechos humanos Familia Latinas Unidas (FLU), Elvira Arellano, supuestamente al confundirla con una indocumentada, en las vías del ferrocarril del municipio de Arriaga, Chiapas.

Arellano, de 35 años de edad y originaria de Michoacán, es desde hace tres años uno de los símbolos más notables de la lucha de los inmigrantes en Estados Unidos, luego de que permaneció refugiada durante más de un año en una iglesia de Chicago y, al final, fue separada de su hijo y deportada.

El anuncio del intento de detención fue hecho por Rubén Figueroa, representante del Movimiento Migrante Mesoamericano, quien dijo que teme por la vida de la activista.

Explicó que Arrellano se encontraba en calidad de “avanzada” para coordinar los trabajos de protesta en contra del gobierno de México y exigir que se “frene los abusos, secuestros, violaciones y asesinatos de los inmigrantes centroamericanos”.

La activista, informó Figueroa, fue interceptada por un grupo de elementos del Instituto Nacional de Migración mientras viajaba con el coordinador de Amnistía Internacional en Puebla, Eduardo García.

Dijo, además, que con estas acciones el gobierno de México pretende boicotear las protestas que se realizarán este viernes en el municipio de Arriaga y en la comunidad de Chahuites, Oaxaca, para exigir que se aclare el caso de los 50 inmigrantes que fueron secuestrados por un grupo de hombres armados.

Mientras se realizaban los preparativos de la protesta, el operativo para la detención de migrantes inició desde las seis de la mañana, cuando tres patrullas del Instituto Nacional de Migración (INM) detuvieron a una veintena de “sin papeles” en Arriaga.

La Crónica, 5 de enero.

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