Un “ala radical” decide rumbo de la sección 22

OAXACA. Considerado como uno de los gremios más aguerridos en Oaxaca, la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) se debate entre la crisis y la agonía ante las acciones y posicionamientos del “ala radical”.

A pesar de que el magisterio oaxaqueño es uno de los principales bastiones de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), grupos en el interior de la misma provocan descontentos y desacuerdos.

En el ensayo Movimiento sindical en México, el caso de Oaxaca, el sociólogo brasileño Julián Gindin indica que la sección 22 (con 75 mil mentores) logró una importante influencia en 1992.

Aunque es la única de las 55 secciones del SNTE, que desde 1982 controla la oposición, no tiene una ideología homogénea. En su interior hay diversas corrientes.

A inicios del siglo XXI, la principal era la Coordinadora Magisterial Oaxaqueña (Comao), que ocupó la dirigencia en 2001 y mantuvo una relación cercana con el gobernador José Murat.

A finales de 2004, la Coordinadora Democrática del Magisterio Oaxaqueño (Codemo), la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) y Praxis-Coalición Obrero Campesina Estudiantil del Istmo impulsaron a Enrique Rueda Pacheco al Comité Ejecutivo, quien cobró relevancia en el conflicto de 2006, cuando surgió la APPO.

La UTE es vista como la más radical, cercana al marxismo. Aliada al Frente Popular Revolucionario se ha caracterizado por violentar acuerdos, aunque uno de cada 10 comparte esta corriente.

El presidente de la Comisión Permanente de Educación, Perfecto Mecinas, reconoce que las acciones que ha emprendido la sección 22 se deben a las determinaciones tomadas por el “ala radical”. Aseguró que este grupo integra a la mayor parte de los delegados que toman las determinaciones en las asambleas.

El Universal, 1º de mayo.