Must carry-must offer no beneficiará a consumidores: Canitec

Las empresas de televisión por cable ahorrarán hasta 100 millones de dólares anuales gracias a que ya estarán obligados a comprar en paquete los canales de televisión abierta para retransmitirlos en sus sistemas. Pese a ello, no hay garantía de que los usuarios se beneficien de estos ahorros mediante una reducción en las tarifas.

"Gracias a que ya no habrá empaquetamiento de canales abiertos, habrá ahorros para la industria de hasta 100 millones de dólares anuales", afirmó Alejandro Puente, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Telecomunicaciones por Cable (Canitec). La prohibición de empaquetar los canales de televisión abierta está incluida en las obligaciones de preponderancia que le impuso el Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) a Televisa.

Además, el empaquetamiento de estas señales también quedó eliminado gracias a la obligación que tienen todas las empresas de televisión abierta de permitir que sus señales sean transmitidas en los canales de televisión de paga sin costo adicional para los usuarios, medida que se conoce técnicamente como must carry-must offer.

A pesar de que las empresas de televisión de paga ya no afrontarán el costo de los canales abiertos, compañías como Dish y Cablevisión aumentaron sus precios en el último año. Dish incrementó en 10 por ciento la tarifa de sus paquetes, mientras que Cablevisión informó que cobrará 10 pesos más por ofrecer su servicio en cada televisión adicional que soliciten sus usuarios.

Adolfo Cuevas, comisionado del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel), explicó que las empresas de televisión de paga no están obligadas legalmente a transferir estos ahorros como beneficios para los consumidores finales, mediante tarifas más bajas de los paquetes: "Hay personas que han interpretado que el pago que estaban realizando las empresas de televisión restringida por esos canales pudiera ser trasladado en beneficio a los usuarios como una disminución de tarifas, pero nada en la Constitución dice que debe ser así. Ha sido una lectura equivocada", detalló.

Explicó que la reforma de telecomunicaciones establece que las compañías de televisión de paga no deben realizar cobros adicionales por los canales de televisión de paga, pero la ley no los obliga a reducir sus precios porque ello implicaría atentar contra la libertad tarifaria de libre mercado que existe en el sector de telecomunicaciones. Consideró que el beneficio para los usuarios podría verse reflejados en mayores inversiones: "No veo una violación a la ley sobre el hecho de que no hubieran trasladado el ahorro a los usuarios, aunque como regulador el efecto que esperamos es el beneficio de los consumidores", añadió.

Adrián Arias, La Crónica, 9 de junio.