Divide a Colombia pacto con FARC

BOGOTÁ.- El primer acuerdo logrado entre la guerrilla colombiana de las FARC y el Gobierno de Juan Manuel Santos en el tema agrario, tras seis meses de negociaciones en La Habana, provocó reacciones encontradas en la clase política y la opinión pública colombiana.

La diferencia de opiniones en torno al anuncio hecho el domingo por ambas partes en la capital cubana, donde se llevan a cabo las negociaciones, evidenció la polarización en la que está el país de cara a un posible acuerdo definitivo para ponerle fin un conflicto de más de 50 años.

Aunque en la comunidad internacional, desde Estados Unidos a Venezuela, han apoyado y se manifestaron satisfechos por este logro hacia una solución negociada al conflicto armado, en Colombia el acuerdo atizó de nuevo las diferencias que despierta cualquier pacto de paz con las FARC.

Si bien el anuncio despertó el optimismo de los grupos políticos que rodean al Presidente Santos, también provocó una oleada de ataques de la Oposición.

En Colombia se consideraba que el tema agrario era el más difícil por ser una de las raíces del conflicto que padece el país desde hace 50 años; sin embargo, los cinco puntos que se negociarán a partir de junio, entre ellos la participación política, su desmovilización y la reparación a víctimas de la violencia, tampoco serán los más fáciles, y más cuando 2014 será un año electoral.

El presidente del Senado, Roy Barreras, miembro de la llamada Unidad Nacional que apoya a Santos, calificó el pacto de histórico e irreversible y dijo que ahora vienen las etapas de contrarreloj hasta noviembre, en referencia a que la negociación debería estar finiquitada antes de fin de año para evitar que la paz sea parte del debate electoral de 2014.

El saliente Ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, afirmó que este primer acuerdo podría ser el inicio para lograr la equidad y el desarrollo en el campo.

El acuerdo llama a un ambicioso programa de restitución y adjudicación de tierras para los pobres, entre otras cosas, pero el Gobierno ha dicho que la propiedad privada no será confiscada.

Sin embargo, el Gobierno notó que el acuerdo entraría en efecto sólo si se logra un acuerdo general.

En la parte contraria, el ex Presidente colombiano Álvaro Uribe afirmó en Twitter que "los terroristas" reciben un premio con el acuerdo y calificó de inaceptable que el modelo del campo se negocie "con el narcoterrorismo".

El presidente de la Federación Colombiana de Ganaderos y probable candidato a la presidencia, José Félix Lafourie, advirtió del sesgo antiempresarial de las FARC, lo que dijo, ha retrasado el desarrollo rural en el país.

En ese mismo tono también se pronunció otro precandidato uribista, Óscar Iván Zuluaga, quien dijo que lo pactado es un replanteamientos total del modelo de desarrollo económico del país.

En las calles bogotanas la gente también opinó.

"Soy realista y es que no creo mucho en este proceso de paz; estoy 50 y 50, pero lo de ayer fue un gran paso'', dijo John Jairo Muñoz, un comerciante de 36 años.

 
 
 
ASÍ LO DIJO
 
 
"Soy realista y es que no creo mucho en este proceso de paz; estoy 50 y 50, pero lo de ayer fue un gran paso''.

John Jairo Muñoz
Comerciante de Bogotá
 
Elizabeth Reyes, Reforma 28 de mayo.

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