La propuesta energética del PRD es noble, pero ingenua: experta del CIDE

Es necesario hacer las reformas constitucionales en materia energética, de lo contrario, no habrá avances, advirtieron ayer juristas al participar en el segundo día de foros sobre reforma energética que lleva a cabo el Senado de la República.

Mario Alberto Becerra Pocoroba, ex rector de la Escuela Libre de Derecho, aseguró que de aprobarse la reforma propuesta por el Ejecutivo, habría un mayor provecho y una eficiente utilización de los recursos con los que cuenta México en el ámbito energético, lo cual redundaría en el desarrollo económico que México requiere.

Dante Sanpedro Jacobo, secretario técnico de la Asociación Mexicana de Derecho Energético, aseguró que México requiere una reforma de gran calado, ya que un sector energético fuerte traerá beneficios de largo plazo para el país. Fauzi Hamdan Amad, rector de la Escuela Libre de Derecho, refirió que mientras las instituciones económicas continúen siendo monopólicas y restrictivas de la participación privada, el crecimiento y desarrollo se irá menguando y extinguiendo.

Juan Carlos Solís, de la Barra de Abogados, dijo que “estamos en el parteaguas del derecho mexicano, en el que tomando la decisión correcta, podríamos impulsar a nuestra querida nación, a grados de desarrollo que no tenemos actualmente”.

Pidió a los legisladores “lograr la justicia en cada mexicano, formando una estructura constitucional y legal, que esté acorde con los millones y millones de nacionales que quieren progresar, con mayores ofertas de trabajo y oportunidad de hacer negocios”.

Myriam Grunstein, investigadora del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), expresó que “aún si fuéramos a mantener un modelo estatalizado, que espero que no sea así, el cambio constitucional sería importante, porque los artículos 25, 27 y 28 están plagados de contradicciones y de vaguedades”.

El Estado, dijo la académica, ha debilitado a Pemex y a la CFE en un afán de mantenerlas bajo control, “pero eso no es regulación. Regulación es sentar reglas del juego, no es cobrar, no es controlar los precios ni las tarifas de los bienes y servicios que prestan los organismos.

Dijo que “la iniciativa del PRD descansa en una hipótesis, a mi juicio muy noble, pero tremendamente ingenua, que estriba en que lo público siempre va a ser bueno, si está gestionado por almas limpias y honestas, y yo quisiera que con la lamparita de Diógenes me presentaran a tres, simplemente Cuauhtémoc Cárdenas dice, con grandes funcionarios honestos, entregados, valientes y mucho dinero, ya salimos del bache. Caray, si es así de simple, no movamos nada”.

Blanca Estela Botello, La Crónica, 3 de octubre.