La proporción de mexicanos radicados en Estados Unidos que envían regularmente remesas al país cayó de 71 por ciento en 2006 a 48 por ciento en 2008, de acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El organismo presentó ayer los resultados de una encuesta realizada en febrero de este año, según los cuales los migrantes mexicanos que envían remesas regularmente lo hacen en promedio 14 veces al año, con un monto de 295 dólares por transferencia.
El estudio indica que 50 por ciento de los migrantes latinoamericanos en Estados Unidos aceptaron enviar dinero de manera regular a sus familias en 2008, contra 73 por ciento en 2006.
Las principales causas de la caída son la desaceleración económica en EU y un ambiente más hostil hacia los migrantes en ese país.
Según el sondeo, 8 de cada 10 migrantes latinoamericanos afirman que les cuesta enviar más dinero a sus hogares ahora que antes y el 51 por ciento de ellos opina que el sentimiento antimigrante en EU complica el envío de remesas.
De los encuestados, el 40 por ciento admite estar ganando menos dinero que el año pasado.
Ante este panorama, el 28 por ciento de los migrantes de América Latina en EU manifiestan que están pensando regresar a sus países.
Entre los 10 principales estados emisores de remesas en EU, Georgia, Texas y Virginia registran las caídas más importantes en el número de migrantes que envían dinero, seguidos de Nueva York, Florida y Arizona.
Así, en 2006, el 85 por ciento de los migrantes en Georgia enviaban remesas a sus hogares, contra el 53 por ciento en 2008; en Virginia, hace un par de años, el 88 por ciento de los latinoamericanos mandaban dinero a sus países de origen, porcentaje que cayó al 59 por ciento en 2008.
Aunque el porcentaje de migrantes latinoamericanos que transfieren dinero regularmente a sus países ha disminuido, aquellos que continúan mandando remesas están enviando mayores sumas y con mayor frecuencia.
Como resultado, concluye el BID, el volumen de remesas de EU hacía América Latina se mantendrá este año en niveles similares a los 2007 y 2006.
"Aunque el monto de remesas se mantenga estable, si millones de inmigrantes dejan de enviar dinero regularmente, sus familias pasarán mayores estrecheces en América Latina, especialmente en países donde las remesas son una fuente clave de ingresos", advirtió sin embargo en un comunicado.
Menos dinero, menos veces
A nivel individual, los mexicanos en Estados Unidos envían menos remesas que otros migrantes latinoamericanos.
De acuerdo con la encuesta del BID, mientras los mexicanos envían un promedio de 295 dólares 14 veces al año, los centroamericanos envían 360 dólares 16 veces al año y los sudamericanos 420 dólares 17 veces al año.
Sin embargo, puesto que los mexicanos representan más del 60 por ciento de los migrantes latinoamericanos en EU, México sigue recibiendo el 53.8 por ciento del total de las remesas a nivel regional.
El organismo presentó ayer los resultados de una encuesta realizada en febrero de este año, según los cuales los migrantes mexicanos que envían remesas regularmente lo hacen en promedio 14 veces al año, con un monto de 295 dólares por transferencia.
El estudio indica que 50 por ciento de los migrantes latinoamericanos en Estados Unidos aceptaron enviar dinero de manera regular a sus familias en 2008, contra 73 por ciento en 2006.
Las principales causas de la caída son la desaceleración económica en EU y un ambiente más hostil hacia los migrantes en ese país.
Según el sondeo, 8 de cada 10 migrantes latinoamericanos afirman que les cuesta enviar más dinero a sus hogares ahora que antes y el 51 por ciento de ellos opina que el sentimiento antimigrante en EU complica el envío de remesas.
De los encuestados, el 40 por ciento admite estar ganando menos dinero que el año pasado.
Ante este panorama, el 28 por ciento de los migrantes de América Latina en EU manifiestan que están pensando regresar a sus países.
Entre los 10 principales estados emisores de remesas en EU, Georgia, Texas y Virginia registran las caídas más importantes en el número de migrantes que envían dinero, seguidos de Nueva York, Florida y Arizona.
Así, en 2006, el 85 por ciento de los migrantes en Georgia enviaban remesas a sus hogares, contra el 53 por ciento en 2008; en Virginia, hace un par de años, el 88 por ciento de los latinoamericanos mandaban dinero a sus países de origen, porcentaje que cayó al 59 por ciento en 2008.
Aunque el porcentaje de migrantes latinoamericanos que transfieren dinero regularmente a sus países ha disminuido, aquellos que continúan mandando remesas están enviando mayores sumas y con mayor frecuencia.
Como resultado, concluye el BID, el volumen de remesas de EU hacía América Latina se mantendrá este año en niveles similares a los 2007 y 2006.
"Aunque el monto de remesas se mantenga estable, si millones de inmigrantes dejan de enviar dinero regularmente, sus familias pasarán mayores estrecheces en América Latina, especialmente en países donde las remesas son una fuente clave de ingresos", advirtió sin embargo en un comunicado.
Menos dinero, menos veces
A nivel individual, los mexicanos en Estados Unidos envían menos remesas que otros migrantes latinoamericanos.
De acuerdo con la encuesta del BID, mientras los mexicanos envían un promedio de 295 dólares 14 veces al año, los centroamericanos envían 360 dólares 16 veces al año y los sudamericanos 420 dólares 17 veces al año.
Sin embargo, puesto que los mexicanos representan más del 60 por ciento de los migrantes latinoamericanos en EU, México sigue recibiendo el 53.8 por ciento del total de las remesas a nivel regional.
Nota de SIlvia Garduño, Reforma, 1º de mayo.
0 Responses to "Dejan paisanos de enviar remesas"
Publicar un comentario