NUEVA YORK. Con la compra de un importante paquete accionario en el corporativo The New York Times, el empresario Carlos Slim no sólo refuerza su emporio en el mundo de las telecomunicaciones, sino que gana una importante voz en uno de los medios más influyentes de Estados Unidos y el mundo.
El grupo de medios anunció el lunes el acuerdo financiero con las compañías de Slim, el Banco Inbursa y la Inmobiliaria Carso, por 125 millones de dólares cada una. Su presidenta, Janet L. Robinson, informó que la inyección de efectivo se empleará para refinanciar la deuda existente y proporcionar a la empresa mayor flexibilidad financiera.
“Al adquirir acciones en The New York Times, Slim se proyecta en EU como un importante inversionista, sin importar cómo resulten sus inversiones”, aseguró Armand Peschard-Sverdrup, un importante miembro del Centro para Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington.
Slim también espera obtener una utilidad aceptable de su inversión; The New York Times le pagará 14% de interés además de garantías que puede utilizar para incrementar sus acciones en la empresa de 6.9 a 17 por ciento.
“The New York Times necesita dinero en los próximos meses y Slim lo tiene”, dijo Shannon K. O’Neil, del Consejo de Relaciones Exteriores de Nueva York. En septiembre, Slim compró 128 millones de dólares en acciones de la empresa en la bolsa de valores, una inversión que desde entonces ha disminuido a 58 millones.
En esta ocasión, el empresario está asegurando sus utilidades. Slim comprará notas a seis años en la compañía con garantías para convertirlas en acciones comunes.
Algunos analistas creen que el empresario está usando su fino olfato para las ganancias en un momento en el que los inversionistas están demasiado atemorizados para arriesgar su dinero debido a la crisis financiera mundial.
El grupo de medios anunció el lunes el acuerdo financiero con las compañías de Slim, el Banco Inbursa y la Inmobiliaria Carso, por 125 millones de dólares cada una. Su presidenta, Janet L. Robinson, informó que la inyección de efectivo se empleará para refinanciar la deuda existente y proporcionar a la empresa mayor flexibilidad financiera.
“Al adquirir acciones en The New York Times, Slim se proyecta en EU como un importante inversionista, sin importar cómo resulten sus inversiones”, aseguró Armand Peschard-Sverdrup, un importante miembro del Centro para Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington.
Slim también espera obtener una utilidad aceptable de su inversión; The New York Times le pagará 14% de interés además de garantías que puede utilizar para incrementar sus acciones en la empresa de 6.9 a 17 por ciento.
“The New York Times necesita dinero en los próximos meses y Slim lo tiene”, dijo Shannon K. O’Neil, del Consejo de Relaciones Exteriores de Nueva York. En septiembre, Slim compró 128 millones de dólares en acciones de la empresa en la bolsa de valores, una inversión que desde entonces ha disminuido a 58 millones.
En esta ocasión, el empresario está asegurando sus utilidades. Slim comprará notas a seis años en la compañía con garantías para convertirlas en acciones comunes.
Algunos analistas creen que el empresario está usando su fino olfato para las ganancias en un momento en el que los inversionistas están demasiado atemorizados para arriesgar su dinero debido a la crisis financiera mundial.
AP, El Economista, 21 de enero.
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