La iniciativa del Partido Acción Nacional (PAN) en materia laboral “no tiene futuro” y, en lugar de denostar a los críticos de la misma, el secretario del Trabajo, Javier Lozano, debería colaborar en la definición de una nueva propuesta.
Lo anterior fue señalado por el dirigente de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), Isaías González Cuevas, también diputado federal priísta.
Como se ha publicado, dijo, los líderes del sector obrero ya sepultaron la iniciativa del PAN, así que esa ley no tiene futuro, y tan no lo tiene que los diputados ya llegamos a un acuerdo para analizar el tema y generar, eventualmente, una nueva iniciativa con las opiniones de todos los actores involucrados en el sector laboral.
“Se hizo una comisión para invitar al sector empresarial, a los académicos y a los partidos para hacer un nuevo documento. Esto quiere decir que la que presentó el PAN no va. Claro que la analizaremos y si tiene algo bueno qué aportar se tomará, pero de lo contrario, no”, expresó.
Lozano, responsable de la política laboral del país, declaró el jueves pasado que quienes critican esa iniciativa no han sabido leer su contenido o persiguen intereses oscuros. Y, en esa posibilidad, mencionó a medios de comunicación, sindicatos y especialistas que advierten efectos negativos en la iniciativa impulsada por el presidente Felipe Calderón.
Tras el rechazo a la iniciativa del Ejecutivo, presentada en tribuna por la bancada panista en San Lázaro, los legisladores de oposición procedentes del sector sindical acordaron convocar a un periodo de análisis del que surja, de manera conjunta, otro proyecto de cambios a la Ley Federal del Trabajo.
Incluso, un grupo de diputados del PRD busca introducir cambios al artículo 123 constitucional para transformar el andamiaje de la justicia laboral y desaparecer instancias como la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos.
En un punto de acuerdo conjunto de todas las fuerzas políticas representadas en la Cámara de Diputados, se invitará a representantes de trabajadores, empresarios, gobierno, partidos políticos y académicos a presentar propuestas para elaborar, en su caso, un nuevo proyecto de reforma.
El objetivo en este año (tal como ha ocurrido al menos en la década reciente) es intentar generar una iniciativa de consenso, a fin de allanar el camino para su discusión y eventual aprobación en el Congreso de la Unión.
Con ello, precisó el diputado y líder croquista Cuevas González, podrá surgir un cambio a la ley que se adapte a los requerimientos del sector productivo “y no una iniciativa unilateral como la que presentó Acción Nacional, porque a todas luces se ve que desconocen el espíritu del artículo 123 constitucional”.
En especial, comentó en entrevista, está el tema del pago por horas, que se contrapone con el derecho básico a la permanencia en el trabajo y afecta también la seguridad social, la contratación colectiva y la sindicalización.
Lo que motivó el punto de acuerdo, dijo, es que en esta nueva etapa de análisis participen los que conocen del tema y a diario están inmersos en el sector laboral.
El dirigente manifestó su desacuerdo con la reacción del secretario Lozano porque –al menos en términos formales– la iniciativa no es del Ejecutivo sino de los legisladores del PAN, y son ellos, en todo caso, quienes deberían defenderla.
“Si él (Lozano) la hubiera presentado, pues otra cosa sería. En tal caso, sí le quedaría hacer críticas, pero en los hechos la presentó el PAN y pues que la defienda el PAN”, dijo.
La CROC, con amplia presencia en la titularidad de contratos colectivos en el país y considerada una de las centrales obreras más grandes, ya hizo público su criterio “totalmente en contra” de la iniciativa del panismo.
“(En el Ejecutivo) no tienen por qué estar nerviosos; al contrario, deberían participar en este espacio, preparar documentos y propuestas porque eso de criticar queda ya en el pasado”, dijo.
Lo anterior fue señalado por el dirigente de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), Isaías González Cuevas, también diputado federal priísta.
Como se ha publicado, dijo, los líderes del sector obrero ya sepultaron la iniciativa del PAN, así que esa ley no tiene futuro, y tan no lo tiene que los diputados ya llegamos a un acuerdo para analizar el tema y generar, eventualmente, una nueva iniciativa con las opiniones de todos los actores involucrados en el sector laboral.
“Se hizo una comisión para invitar al sector empresarial, a los académicos y a los partidos para hacer un nuevo documento. Esto quiere decir que la que presentó el PAN no va. Claro que la analizaremos y si tiene algo bueno qué aportar se tomará, pero de lo contrario, no”, expresó.
Lozano, responsable de la política laboral del país, declaró el jueves pasado que quienes critican esa iniciativa no han sabido leer su contenido o persiguen intereses oscuros. Y, en esa posibilidad, mencionó a medios de comunicación, sindicatos y especialistas que advierten efectos negativos en la iniciativa impulsada por el presidente Felipe Calderón.
Tras el rechazo a la iniciativa del Ejecutivo, presentada en tribuna por la bancada panista en San Lázaro, los legisladores de oposición procedentes del sector sindical acordaron convocar a un periodo de análisis del que surja, de manera conjunta, otro proyecto de cambios a la Ley Federal del Trabajo.
Incluso, un grupo de diputados del PRD busca introducir cambios al artículo 123 constitucional para transformar el andamiaje de la justicia laboral y desaparecer instancias como la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos.
En un punto de acuerdo conjunto de todas las fuerzas políticas representadas en la Cámara de Diputados, se invitará a representantes de trabajadores, empresarios, gobierno, partidos políticos y académicos a presentar propuestas para elaborar, en su caso, un nuevo proyecto de reforma.
El objetivo en este año (tal como ha ocurrido al menos en la década reciente) es intentar generar una iniciativa de consenso, a fin de allanar el camino para su discusión y eventual aprobación en el Congreso de la Unión.
Con ello, precisó el diputado y líder croquista Cuevas González, podrá surgir un cambio a la ley que se adapte a los requerimientos del sector productivo “y no una iniciativa unilateral como la que presentó Acción Nacional, porque a todas luces se ve que desconocen el espíritu del artículo 123 constitucional”.
En especial, comentó en entrevista, está el tema del pago por horas, que se contrapone con el derecho básico a la permanencia en el trabajo y afecta también la seguridad social, la contratación colectiva y la sindicalización.
Lo que motivó el punto de acuerdo, dijo, es que en esta nueva etapa de análisis participen los que conocen del tema y a diario están inmersos en el sector laboral.
El dirigente manifestó su desacuerdo con la reacción del secretario Lozano porque –al menos en términos formales– la iniciativa no es del Ejecutivo sino de los legisladores del PAN, y son ellos, en todo caso, quienes deberían defenderla.
“Si él (Lozano) la hubiera presentado, pues otra cosa sería. En tal caso, sí le quedaría hacer críticas, pero en los hechos la presentó el PAN y pues que la defienda el PAN”, dijo.
La CROC, con amplia presencia en la titularidad de contratos colectivos en el país y considerada una de las centrales obreras más grandes, ya hizo público su criterio “totalmente en contra” de la iniciativa del panismo.
“(En el Ejecutivo) no tienen por qué estar nerviosos; al contrario, deberían participar en este espacio, preparar documentos y propuestas porque eso de criticar queda ya en el pasado”, dijo.
Fabiola Martínez, La Jornada, 3 de abril.
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