Doce horas después, vía telefónica se amenazó con hacer estallar una bomba en la Torre de Gobierno, donde alrededor de 3 mil 700 personas trabajan en oficinas de las secretarías de Desarrollo Económico, Desarrollo Social, Obras Públicas y la Agencia Ambiental. La advertencia provocó que en cuestión de minutos elementos de seguridad privada desalojaran el edificio de 12 pisos.
El ataque a Televisa ocasionó la interrupción de la señal en su Canal 26, así como del 7 de la compañía Multimedios, y del 10 regional, debido a que la explosión dañó el suministro de energía eléctrica en gran parte de la zona sur de la ciudad.
El atentado fue confirmado por conductores de Televisa, quienes detallaron que el estallido cimbró los domicilios en varias cuadras a la redonda de donde se ubican sus instalaciones. Trascendió que antes de las explosiones hubo un enfrentamiento entre sujetos fuertemente armados.
Los reporteros de la televisora recibieron instrucciones de no presentarse a trabajar y así proteger su integridad física. El impacto mediático y de las redes sociales generó que en oficinas administrativas del Seguro Social se autorizara la salida de los trabajadores a las 14 horas, tres antes de su horario normal.
A pesar de que la noticia se conoció a muy temprana hora, las más de 370 escuelas de educación básica tuvieron actividades de manera normal; los alumnos salieron de clases a las 13 horas en planteles públicos y a las 14:30 en privados.
En un comunicado, la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas informó que el primer atentado ocurrió en los primeros minutos del viernes frente a las instalaciones del Canal 26 de Televisa, donde explotó un vehículo Chevrolet tipo Corsica color rojo, con placas de Texas.
El segundo estallido ocurrió frente a las oficinas de la Dirección de Tránsito Municipal. A las 1:08 horas se reportó la detonación de un artefacto explosivo; en el lugar se encontró un automóvil Mazda color blanco, también con placas de Texas.
Movilización federal
Las detonaciones provocaron la movilización de las fuerzas federales que acordonaron las áreas afectadas y resguardaron los inmuebles atacados, evitando el paso de vecinos de colonias aledañas. La procuraduría estatal informó que colabora con la Procuraduría General de la República (PGR) en las investigaciones.
El cártel de Los Zetas es el posible responsable de hacer estallaar los dos autos bomba en instalaciones de Televisa y de la Dirección de Tránsito Municipal en Ciudad Victoria, de acuerdo con información obtenida de funcionarios que participan en el gabinete de seguridad nacional.
La PGR empezó una averiguación previa por violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos. Según reportes del gobierno federal, se considera que la capital tamaulipeca está en manos de Los Zetas, grupo criminal al que se ha señalado como responsable de la ejecución de 72 migrantes de Centro y Sudamérica en un rancho localizado en el municipio de San Fernando, el pasado lunes.
Aunque las actividades del gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores, fueron canceladas “por medidas de seguridad”, en entrevista con Radio Fórmula el mandatario priísta reconoció que en algunas zonas del estado su administración ya fue rebasada por el crimen organizado.
Dijo que desde febrero pasado se complicaron las cosas, cuando los cárteles del Golfo y de Los Zetas tomaron las carreteras y las ciudades como centros de batalla. Estimó además que el nivel de inseguridad que vive la entidad no va a terminar pronto.
En un comunicado, Hernández Flores condenó enérgicamente los ataques contra las instituciones públicas y privadas. Dijo que la agresión a los medios de comunicación lastima a la sociedad y deben ser calificados como lo que son: “actos sin escrúpulos de la delincuencia organizada”.
Agregó que cualquier planteamiento de carácter militar o policial debe asegurar, como punto de partida, la integridad física de los ciudadanos, por lo que insistió en el envío de mayor número de elementos de seguridad federal, en detener el tráfico de armas por la frontera norte y en basar los planteamientos tácticos en la protección de las ciudades y las carreteras.
En lo que va del año, las instalaciones de Televisa han sido atacadas por desconocidos en al menos cinco ocasiones; dos en Monterrey, Nuevo León, y una en Matamoros, Nuevo Laredo y Ciudad Victoria, Tamaulipas.
Con información de Gustavo Castillo, Notimex, Dpa, Reuters y Afp
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