Caracas, 27 de agosto. La policía investiga la explosión de una granada de bajo impacto lanzada frente a un edificio de médicos cubanos en Caracas la noche del viernes. El presidente Hugo Chávez aseguró que la oposición venezolana actúa por desesperación ante su predecible fracaso en las elecciones.
El dispositivo fue colocado en el municipio de Chacao, al este de Caracas, frente a la residencia de los cubanos que forman parte de los planes sociales impulsados por el gobierno del presidente Chávez.
Emilio Graterón, alcalde de Chacao, agregó que “no parece ser una actuación deliberada o preparada con un fin determinado”, y descartó heridos o daños materiales graves.
Opositores al gobierno han criticado la presencia de médicos y profesionales cubanos, y alegan que intentan asesorar a Chávez para que instaure un modelo similar al de Cuba; sin embargo Caracas se defendió al decir que los médicos brindan servicios a los pobres en barrios de difícil acceso.
De acuerdo con el mandatario, a estas alturas de agosto sus rivales políticos esperaban ver al país sumido en el caos, escenario favorable para sus pretensiones de apoderarse del Parlamento para desde allí destruir la revolución.
Para el presidente, muestra de la situación de los opositores es su conducta la víspera del inicio de la campaña electoral.
“Ellos andan provocando y ofendiendo, ayer querían tomar la Asamblea Nacional”, comentó en el teatro Teresa Carreño, durante la graduación de médicos venezolanos que estudiaron en Cuba. Ahí desmintió rumores sobre un supuesto diagnóstico de cáncer.
El próximo 26 de septiembre se celebrarán comicios cruciales en Venezuela que definirán si Chávez mantiene su mayoría en la Asamblea Nacional, cuando más de 17 millones 500 mil venezolanos escojan a 165 diputados. Las encuestas, hasta ahora, dan el triunfo a la alianza revolucionaria.
En asuntos internos, Gustavo Rojas, candidato de oposición a las elecciones legislativas de Venezuela por el partido Primero Justicia, está rifando una cirugía de colocación de implantes de senos para financiar su campaña.
El dispositivo fue colocado en el municipio de Chacao, al este de Caracas, frente a la residencia de los cubanos que forman parte de los planes sociales impulsados por el gobierno del presidente Chávez.
Emilio Graterón, alcalde de Chacao, agregó que “no parece ser una actuación deliberada o preparada con un fin determinado”, y descartó heridos o daños materiales graves.
Opositores al gobierno han criticado la presencia de médicos y profesionales cubanos, y alegan que intentan asesorar a Chávez para que instaure un modelo similar al de Cuba; sin embargo Caracas se defendió al decir que los médicos brindan servicios a los pobres en barrios de difícil acceso.
De acuerdo con el mandatario, a estas alturas de agosto sus rivales políticos esperaban ver al país sumido en el caos, escenario favorable para sus pretensiones de apoderarse del Parlamento para desde allí destruir la revolución.
Para el presidente, muestra de la situación de los opositores es su conducta la víspera del inicio de la campaña electoral.
“Ellos andan provocando y ofendiendo, ayer querían tomar la Asamblea Nacional”, comentó en el teatro Teresa Carreño, durante la graduación de médicos venezolanos que estudiaron en Cuba. Ahí desmintió rumores sobre un supuesto diagnóstico de cáncer.
El próximo 26 de septiembre se celebrarán comicios cruciales en Venezuela que definirán si Chávez mantiene su mayoría en la Asamblea Nacional, cuando más de 17 millones 500 mil venezolanos escojan a 165 diputados. Las encuestas, hasta ahora, dan el triunfo a la alianza revolucionaria.
En asuntos internos, Gustavo Rojas, candidato de oposición a las elecciones legislativas de Venezuela por el partido Primero Justicia, está rifando una cirugía de colocación de implantes de senos para financiar su campaña.
La Jornada, 28 de agosto.
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